Los hermanos Roca (Joan, Josep y Jordi) son restauradores de tercera generación en su familia que tenían el sueño de comenzar una nueva empresa propia. Su restaurante, El Celler de Can Roca, ha sido un gran éxito, ganó tres estrellas Michelin y fue nombrado mejor restaurante del mundo en 2013 y 2015. Aunque cada una de sus habilidades es diferente (Joan es el chef, Josep es el sumiller y Jordi es el repostero jefe), los ingredientes principales de su éxito son los mismos: la calidad y sostenibilidad que dan prioridad a las personas y al planeta.
“Queremos alcanzar la armonía a través del equilibrio económico, social y medioambiental”, afirma Joan Roca. “Eso significa apoyar productos locales excelentes, cuidadosamente seleccionados y promover hábitos saludables mediante una alimentación sana”.
Impulsado por esta filosofía, el Celler de Can Roca, en colaboración con el banco BBVA, puso en marcha el proyecto “Gastronomía Sostenible” al comienzo de la pandemia. La idea es sencilla: apoyar a los pequeños productores y promover la cocina casera saludable con productos locales y de temporada, mediante un monográfico mensual de recetas e ingredientes diseñado por los hermanos Roca. Los productores seleccionados aparecen en el sitio web de la iniciativa, por lo que los cocineros caseros pueden hacerles pedidos directamente en el futuro y establecer una relación con los agricultores, pescadores y apicultores locales.
“Hemos sido el mejor restaurante del mundo y ahora, gracias al BBVA, queremos ser el mejor restaurante para el mundo”, afirma Jordi Roca.
La preocupación de los hermanos por proteger la biodiversidad y los recursos naturales derivó en otro proyecto, el documental “Sembrando el Futuro”. En este, emprenden un viaje para recuperar sabores y alimentos extinguidos a la vez que promueven el consumo de alimentos locales que benefician la salud de las personas y mantienen viva la memoria cultural y las tradiciones. Los hermanos Roca ponen en primer plano la importancia de la biodiversidad en este proyecto y conversan con expertos de instituciones internacionales como el Tratado Internacional FAO sobre los Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura, sobre soluciones para protegerla y cómo contribuye a las dietas saludables, mejora los medios de vida rurales y fortalece la resiliencia de las personas y de las comunidades.
Desde 2016, los hermanos también han sido Embajadores de buena voluntad del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), utilizando su plataforma para promocionar sistemas agroalimentarios ambientalmente sostenibles que sean justos socialmente y económicamente inclusivos.
