De conformidad con la decisión tomada por el Consejo en su Primer Período de Sesiones, el Director General sometió dos informes sobre los problemas de las divisas, es decir, una declaración periódica sobre los acontecimientos recientes (CL 2/2), y el primer informe preparado después de haber celebrado consultas con el Fondo Monetario Internacional sobre las medidas que se han tomado o podrían tomarse para mejorar la situación de las divisas (CL 2/ 28).
El Consejo toma nota de estos informes que una vez más ponen de manifiesto el obstáculo tan formidable que las dificultades de cambio colocan en el camino del libre movimiento de los alimentos y forrajes en el comercio mundial, siendo una traba constante para la producción de alimentos en los países exportadores y para el mejoramiento del consumo óptimo en los países importadores. Aún cuando el problema de las divisas extranjeras no cae dentro de la esfera de actividades de la FAO, el Consejo estima que está obligado a manifestar con claridad que a no ser que se adopten medidas progresistas destinadas a resolver este problema, el logro de una producción máxima de substancias alimenticias resultará imposible. Por lo tanto, llama la atención de las autoridades competentes acerca de la importancia fundamental de este problema.
