J. Zander
J. ZANDER es profesor de la Universidad Agrícola de Wageningen, Países Bajos. El presente artículo es una adaptación de la introducción a Ergonomics in tropical agriculture and forestry: Proceedings of the Fifth Joint Ergonomic Commissions of IAAMRH, CIGR and IUFRO, Wageningen, Países Bajos, mayo de 1979; J.H. van Loon, F.J. Staudt y J. Zander, ed. Estas actas pueden solicitarse a: Centro de Publicaciones y Documentación Agrícola, Wageningen, Países Bajos.
Mientras el hombre empleó herramientas y máquinas sencillas, era posible proyectarlas empleando métodos empíricos. Pero la mecanización ha producido muchos cambios en los métodos y condiciones de trabajo. A veces las máquinas han hecho el trabajo más fácil y agradable. Pero en muchos casos la mecanización produce cambios que, si bien alivian el esfuerzo físico, aumentan el esfuerzo perceptivo y mental. A medida que las máquinas se van haciendo más complejas, los métodos empíricos van dejando de ser suficientes para analizar y mejorar las condiciones de trabajo.
La ergonomía (adaptación del trabajo al trabajador) es una actividad multidisciplinaria que está relacionada con las condiciones de trabajo. Tiene por objeto lograr una relación óptima trabajador-trabajo en la cual sea posible mantener el equilibrio entre el trabajador y las condiciones de trabajo. Por eso sirve para evaluar las condiciones de trabajo más complejas que crea una tecnología que cambia.
El trabajo agrícola y forestal juega un papel importante en la sociología, la cultura y la economía de los países tropicales, y ergonómicamente merece estudiarse más. ¿Cómo puede adaptarse de la mejor manera posible el trabajo al trabajador en las condiciones del trópico?
La ergonomía puede tener una función importante a nivel humano, mejorando las condiciones de vida y de trabajo en la actividad agrícola y forestal, sobre todo cuando se producen cambios. El método ergonómico puede contribuir a:
· proyectar una relación óptima trabajador-trabajo (ergonomía preventiva);
· mejorar una relación trabajador-trabajo (ergonomía curativa);
· prever el esfuerzo de trabajo y el rendimiento y la seguridad del sistema.
A través de los sentidos el trabajador recibe una corriente continua de información que le transmite la herramienta o la máquina. Esto es lo que se denomina «esfuerzo perceptivo s. Después de ser percibido, el esfuerzo se coteja con la memoria y enseguida se toman decisiones entre las alternativas que se presentan, para orientar una operación específica. Este proceso de selección es el a esfuerzo mental». La actividad muscular necesaria es el a esfuerzo físico». Durante este proceso, el trabajador observa continuamente los efectos de sus actos. Tal proceso se llama «percepción refleja» (feedback).
Antropometría. Los datos acerca del trazado del sitio de trabajo, y de los mandos de las máquinas, los determinan las características del cuerpo humano. La antropometría se ocupa de medir el cuerpo humano y los aspectos biomecánicos de los movimientos del cuerpo y de sus miembros, así como de la postura en que trabaja y las fuerzas que tiene que aplicar a los objetos que lo rodean: herramientas de mano y mandos.
Gracias a la investigación estadística realizada en varios países, se han acumulado vastos conocimientos sobre las dimensiones corporales de grandes grupos de la población. Al emplear datos acerca del sexo, la edad y la raza no se debe considerar sólo un «promedio» irreal sino también los extremos de las características de tamaño, peso, etc. Es preciso que haya espacio suficiente para hacer adaptaciones en forma sencilla y segura. Al tratar de medir el cuerpo conviene considerar lo que sigue:
· la definición de las dimensiones del cuerpo y manera de medirlas;
· los datos tabulados del 5°, 50° y 95° percentil y de la desviación normal;
· los factores de corrección aplicables a la ropa y al equipo personal y a otras variables pertinentes.
Para lograr el rendimiento óptimo es necesario que los movimientos de los miembros del cuerpo sean tales que se origine un esfuerzo favorable; hay que evitar los movimientos que producen fatiga. Según los principios de la economía de los movimientos, éstos deben limitarse al mínimo posible para realizar el trabajo satisfactoriamente. Moviendo los miembros del cuerpo en armonía se obtienen resultados sencillos y lógicos. Conviene prestar atención a lo siguiente: (a) un buen equilibrio entre los movimientos corporales; (b) amplitud, fuerza, velocidad y ritmo de los movimientos mutuamente ajustables; (c) los movimientos que exigen gran exactitud no deben requerir mucha fuerza muscular.
La postura de trabajo la determina en gran parte el trazado y la forma de las herramientas, así como la colocación y el movimiento de los mandos. Actualmente en la literatura ergonómica se dan a conocer la ubicación probable del dolor y otros síntomas debidos a una mala postura.
Hay tres modelos generales de postura: permanecer de pie, permanecer sentado todo el tiempo y cambiar de postura sentándose y poniéndose de pie. En la postura de pie se considera por lo general que el trabajador en todo momento puede moverse en varias direcciones. Si no se necesita esta libertad o no la hay, conviene trazar el lugar de trabajo de tal manera que el trabajador esté sentado todo el tiempo o pueda cambiar de posición sentándose y poniéndose de pie. Es preciso evitar la fatiga muscular estática.
Las fuerzas que pueden ejercerse dependen del grupo de músculos, de la postura, de la dirección, de la magnitud y de la duración de la fuerza. En general, un ser humano es capaz de mantener sin fatiga muscular 10 a 15% de la fuerza máxima de un músculo durante un largo período de tiempo. Con el ejercicio pueden aumentar la fuerza y la resistencia, dentro de los limites impuestos por el potencial físico del trabajador. Conviene prestar atención a lo que sigue:
· la fuerza exigida debe ser compatible con la capacidad física del trabajador;· los grupos de músculos interesados deben tener una fuerza suficiente para hacer el esfuerzo exigido;
· si se exige un esfuerzo excesivo hay que usar fuentes de energía auxiliares;
· hay que evitar mantener ininterrumpidamente en tensión un mismo músculo por mucho tiempo.
Muchas de las herramientas de mano y de las máquinas empleadas por los trabajadores agrícolas y forestales en los países tropicales son importadas. Esto puede significar que el trazado del lugar de trabajo es inapropiado si no se presta atención a los aspectos antropométricos y biomecánicos de los usuarios. Por eso hay que hacer estudios antropométricos en los países importadores.
Percepción. La percepción de la información que recibe el trabajador de su ambiente de trabajo se produce a través de los sentidos, que son sensibles a impulsos específicos. La reacción a la información depende del órgano de los sentidos estimulado, de la fuerza del estimulo y del lugar a donde llega el estimulo.
La vista juega un papel importante en la relación trabajador-trabajo, porque la mayor parte de la información penetra en el sistema nervioso central a través de los ojos. Además, la mayor parte de los actos se realizan bajo el control de los ojos. Con los ojos se pueden observar no sólo el color, la luz y la oscuridad, sino también estimar de manera razonable la dirección y la velocidad de los objetos en movimiento.
Las características del campo visual determinan la visibilidad del trabajo. El campo visual pueden ampliarlo los movimientos del cuerpo, pero esto hace desmejorar la postura del cuerpo y además aumenta el esfuerzo y disminuye el rendimiento del trabajo.
La comunicación entre el trabajador y el trabajo, lo mismo que la comunicación entre dos personas, se establece a través del oído, por intermedio de las vibraciones de la presión. Según la frecuencia, el nivel de presión y el tiempo de exposición, los efectos del sonido son de molestos a perjudiciales.
El nivel de presión del sonido en las máquinas agrícolas y forestales ha sido objeto de mucha atención. En muchas maquinas la presión media del sonido es demasiado elevada. Esto hace disminuir la capacidad auditiva, en la mayoría de los casos permanente e irreversiblemente. En la actualidad se reconoce en general que la exposición constante a niveles de presión del sonido de 85 dBA o más hace necesario protegerse los oídos para evitar daños. La protección puede lograrse con medios técnicos (máquinas más silenciosas, aislamiento de la fuente sonora, o reducción de la transmisión del sonido), o con medios personales (mayor distancia entre la fuente del sonido y el trabajador, o uso de protectores del oído).
Desde el punto de vista ergonómico, el olfato y el gusto tienen menos importancia, porque son pocos los actos que requieren el uso de estos sentidos. Pero los trabajadores agrícolas y forestales están sujetos a cantidades crecientes de contaminantes del aire, tales como el polvo, los gases y el humo. Trabajar en medio del polvo, de la suciedad o del humo reduce la visibilidad, irrita los ojos, la nariz y la garganta y puede provocar malestar. Por lo general estos efectos duran poco. Los efectos que duran más provocan enfermedades crónicas o debilidad y son objeto de mayor preocupación. Afectan la vitalidad del trabajador y lo hacen más susceptible a muchas enfermedades.
Es escasa la información que penetra en el sistema nervioso central a través del tacto, pero puede tener considerable efecto sobre la salud y el rendimiento del trabajador.
Las vibraciones se transmiten a través de las partes del cuerpo que están en contacto con la fuente de vibración, por lo general las manos, los brazos, los pies o las nalgas. A veces sólo las manos o los brazos experimentan la vibración, en otros casos esto sucede en todo el cuerpo.
En los últimos años se ha prestado atención especialmente a varias deficiencias y enfermedades corporales relacionadas con la exposición a vibraciones mecánicas. El efecto e impacto de las vibraciones varia con la frecuencia, porque la sensibilidad del cuerpo humano a las vibraciones mecánicas llega al máximo dentro de un margen de 2 a 6 Hz. El impacto de las vibraciones varia entre una molestia, el daño a la salud y la disminución del rendimiento. La protección contra las vibraciones mecánicas puede lograrse con medios técnicos (aislamiento de la fuente de vibraciones y reducción de su transmisión), o con medios personales (cojines, asientos).
Selección. El trabajador no recibe simplemente los datos a través de los órganos de los sentidos, sino que los elabora, prepara las diversas posibilidades, escoge la reacción adecuada y la transforma en acción. La capacidad de elaboración de la información la determina principalmente la capacidad del mecanismo de decisión central. Mientras más complejos son los circuitos a seguir, menor es la capacidad.
Dada la gran variedad de estructuras y operaciones, es casi inconcebible poder encontrar un parámetro universal para determinar el esfuerzo mental. Pero pueden distinguirse las categorías siguientes: (a) medición del rendimiento, (b) psicometría y (c) fisiometría.
La determinación del esfuerzo mental es un reto a los psicólogos y psicofisiólogos experimentales. No obstante su gran número, son pocas las técnicas que pueden aplicarse en forma general y su valor es dudoso en el mejor de los casos. Según las investigaciones conocidas se espera obtener los mejores resultados en la determinación del esfuerzo mental mediante:
· un método que consista en efectuar dos trabajos al mismo tiempo, de modo que la capacidad mental no utilizada en uno se emplee en la realización del otro;· un método en el que se mida el ritmo cardíaco durante el trabajo y sobre todo la supresión relativa de la arritmia sinusal, para compararlo con el ritmo del corazón en reposo.
Cuando el trabajador reconoce o llega a conocer los estímulos periódicos o de otra manera previsibles, reacciona efectuando movimientos bien aprendidos y trabaja con eficacia. El aprendizaje hace que las reacciones a la información recibida sean más fáciles, más rápidas y mejores. Además, como el trabajador llega a conocer su propia máquina mejor que cualquier otra, disminuyen sus posibilidades de error. Indirectamente esto mejora el rendimiento de la relación trabajador-trabajo.
Se han ideado simuladores para estudiar las componentes de los esfuerzos en una relación trabajador-trabajo, con condiciones controladas, para obtener información acerca de las cualidades ergonómicas del trazado del sitio de trabajo de determinada máquina o el efecto de la capacitación. Aumentando los gastos de investigación, se pueden obtener en esta forma datos de valor en relativamente poco tiempo.
Uno de los objetivos del ergonomista debe consistir en tratar de reducir el esfuerzo mental en las diversas labores agrícolas y forestales. Esto puede lograrse descartando la información redundante o inútil y además presentando la información útil en la forma adecuada. De esta manera la ergonomía puede contribuir a la elaboración eficaz de la información recibida con mayor velocidad (gracias a la mayor capacidad) y a lograr un esfuerzo menor del trabajador.
Acción. Un hombre, para trabajar, desplazarse e incluso para permanecer vivo confortablemente necesita que su cuerpo disponga de energía. La energía requerida se suministra al cuerpo en forma de alimento. Simplificando, el cuerpo es una máquina que da energía al sistema locomotor empleando el oxígeno que entra a través del sistema respiratorio y quemando el combustible que entra a través del sistema digestivo.
Una persona consume más energía cuando trabaja más, y por eso respira más rápida y más profundamente para aumentar la inspiración de oxígeno. Su ritmo cardíaco se acelera, porque la sangre tiene que acarrear más oxígeno de los pulmones a los músculos, y más calor sobrante de los músculos que trabajan al resto del cuerpo para dispersarlo. Además, este exceso de calor hace que suba la temperatura del cuerpo.
La capacidad de trabajo de un individuo la limita y la determina principalmente su capacidad de inspirar suficiente oxígeno y de ingerir suficiente alimento. Otros factores que influyen son su salud, su estado físico y su nutrición. El rendimiento mecánico del trabajo humano puede fluctuar entre 0 y 20%, pero raras veces llega al máximo, porque algunos músculos tienen que hacer permanentemente esfuerzos excesivos. El rendimiento máximo posible se logra haciendo movimientos rítmicos, o sea contrayendo y relajando un músculo o grupo de músculos. Se sabe poco acerca de los efectos fisiológicos y patológicos de la fatiga acumulada en varios días seguidos de trabajo intenso y no es posible todavía determinar los límites de la actividad física que puede desplegar un trabajador en un caso de emergencia.
Para determinar el esfuerzo físico son parámetros útiles el consumo de energía, el ritmo respiratorio, el ritmo cardíaco y la temperatura del cuerpo. Basándose en los diversos parámetros fisiológicos se puede aumentar gradualmente el esfuerzo físico. Los resultados así obtenidos pueden aplicarse para hacer el trazado del sitio de trabajo, comparar herramientas y: máquinas, comparar métodos de trabajo, mejorar métodos de trabajo y calcular los períodos de descanso.
En diversos lugares del mundo se han hecho estudios para determinar los parámetros fisiológicos del trabajo agrícola y forestal, pero es poca la información de que se dispone para los países tropicales. Por eso, es claro que hace falta hacer estudios fisiológicos en dichos países. La mecanización puede aliviar muchas de las labores tradicionales, pero es probable que el trabajo agrícola y forestal siga exigiendo un gran gasto de energía física durante una jornada de trabajo.
Clima. No se puede esperar el mismo rendimiento con mal clima que con buen clima. El sentirse bien depende no sólo de la humedad relativa, de la temperatura y de la velocidad del aire, sino también del juicio subjetivo sobre el clima, el que depende del balance térmico del cuerpo.
La reacción fisiológica al calor es el aumento del ritmo cardíaco, de la temperatura del cuerpo, del tiempo de recuperación y de la secreción de sudor. La tendencia general de todos los estudios del ambiente de trabajo es clara: las condiciones atmosféricas alteran la temperatura normal o constante del cuerpo y reducen la capacidad mental y física. En sustancia, la temperatura interna del cuerpo no debe ser superior a 38 °C cuando está expuesto diariamente por mucho tiempo al calor y al trabajo físico intenso. Además, la alimentación - sobre todo la ingestión de líquidos y de sal - debe ser suficiente para suplir las pérdidas. No conviene que las pérdidas de peso debidas a la deshidratación excedan de 2 a 3 % del peso del cuerpo.
Seguridad. Los seres humanos cuando trabajan son muy propensos a cometer errores que son causa de accidentes o lesiones propias o ajenas, de daños al equipo o de paros molestos. La frecuencia de los errores puede reducirse aplicando los principios de la ergonomía. En general, la seguridad depende del proyectista, del fabricante, del propietario, del usuario y de los funcionarios de seguridad. En todo caso, la aplicación del «sentido común» es uno de los factores más eficaces para evitar el peligro.
La reducción del peligro de accidentes en los bosques y la agricultura tropical puede analizarse estudiando: (a) el número de accidentes, lesiones o muertes en relación con el empleo del equipo y (b) las causas primarias de dichos accidentes y, especialmente. los peligros que con más probabilidad causan las lesiones o la muerte.
Es innegable que el trabajo agrícola y forestal es en la actualidad más peligroso que antes. Hay varias circunstancias propias de las arcas de trabajo que contribuyen al conocido alto número de accidentes:
· las irregularidades del terreno y del tiempo;· los trabajos de temporada, que exigen esfuerzos continuos y horas extras;
· el aislamiento de los trabajadores, que les impide pedir auxilio cuando se encuentran en dificultad;
· la capacitación insuficiente en el uso del equipo.
Hay algunos principios positivos cuya observancia por lo general permite usar el equipo con seguridad: (a) la capacitación suficiente en uso de máquinas y equipos; (b) el uso de equipo que por sus características no provoca fatiga ni tensión; (c) las indicaciones claras en los mandos e instrumentos para evitar errores de maniobra; (d) el freno de emergencia fácil de alcanzar y de accionar; (e) los dispositivos para impedir que la máquina se ponga en movimiento accidentalmente.
Las medidas que toma el proyectista deben complementarse con una enseñanza y supervisión adecuadas de la seguridad, pero el proyectar máquinas más seguras tiene una ventaja inherente sobre la educación y la supervisión periódica, porque hace que el equipo sea seguro en sí mismo independientemente del que lo usa.
En el futuro es preciso prestar mucha atención a los aspectos humanos y ambientales de las condiciones de vida y de trabajo en los países tropicales. Este es el primer requisito previo para crear condiciones en las cuales sea posible utilizar el talento humano para el fomento de la producción forestal y agrícola con el máximo de eficiencia.
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