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China - Metasequoia: el árbol fósil nacional

Chao Ghin Ju

EL «ARBOL FOSIL» DE CHINA ya dado por extinguido, tiene ahora un briIlante porvenir (CHAO CHIN JU)

UN PLANTON DE METASECOYA crecimiento potencial de más de 35 metros (JOHN KUSER)

· En el reino vegetal existe un fósil viviente: Metasequoia glyptostroboides, originario de China. Hasta hace poco se pensaba que esta antigua y rara especie arbórea se había extinguido; nadie sabía que en un remoto ángulo de China la población la había conservado y propagado.

En el decenio de 1940, dos científicos chinos, Hu Shian Sou y Cheng Wan Chun, descubrieron M. glyptostroboides en Lichuan, provincia de Hubei. Identificaron la especie a partir de su fósil, uno de los diez fósiles correspondientes a las diez especies arbóreas del género Metasequoia conocidas hasta la fecha. En recuerdo de este descubrimiento, en los círculos científicos se dio a la especie el sobrenombre de «fósil viviente». Esta especie de Metasequoia es sumamente adaptable y crece rápidamente. Sus ramas rectas y robustas producen una madera de alta calidad que se puede emplear para fabricar papel, así como para la construcción y la fabricación de muebles y herramientas agrícolas. Es una especie excelente para programas de repoblación forestal, y la plantación de grandes bosques de Metasequoia cumple una importante función porque renueva la cobertura verde del terreno, aumenta la producción de madera y embellece el paisaje.

Desde 1948 se ha plantado Metasequoia a lo largo del país, y se la ha introducido en más de 50 países de Asia, Africa, Europa y América, donde crece muy bien. Esta especie puede crecer a temperaturas bajo cero, incluso en invierno, en latitudes tan extremas como Leningrado, Copenhague y Alaska: muy pocas especies son tan adaptables como para ser introducidas en una tal variedad de zonas.

Metasequoia es un gran árbol de hoja caduca que puede alcanzar 37 m de altura y 2,2 m de d.a.p. Su adaptabilidad a las condiciones climáticas es muy amplia. Crece bien en zonas donde la media de la temperatura es de 12-20 °C. Resiste bien al invierno; incluso en el norte de China, a lo largo del valle del río Wei, donde la temperatura invernal mínima absoluta es de - 18,7 °C, y en la zona de Lüda, en el nordeste de China, donde la temperatura mínima es de - 19 °C, la especie sobrevive y crece. Crece igualmente bien en zonas donde la precipitación anual es de 1 000 mm. También se adapta a los climas secos, si hay riego durante la estación más seca; en cambio, no resistiría a una sequía prolongada. Puede crecer bien en tierras ligeramente salinas y alcalinas (salinidad inferior al 0,2%). La distribución de Metasequoia en su lugar de origen es a una altitud entre 900 y 1 500 m, pero mayormente a 1 050 m. Los mejores resultados se obtuvieron cuando se la introdujo en suelos aluvionales, en llanuras y junto a los cursos de agua, y en las bases de las colinas, donde hay más humedad y el declive no es acentuado.

El rápido crecimiento es una de las mayores ventajas de Metasequoia. En su lugar de origen el índice de crecimiento vertical anual es de 30 a 80 cm, y la expansión promedio de su tronco a la altura del pecho es de 1 a 1,75 cm. Las ramas conductoras del crecimiento continuo en altura (1,43 m) aparecen a los 10-15 años, y las pautas de expansión del crecimiento continuo del d.a.p. a los 20~25 años. En las zonas donde el árbol se introduce por primera vez, los valores máximos de crecimiento continuo tanto en altura como en d.a.p. aparecen incluso antes, y el valor absoluto es mayor. Esto pone de manifiesto sus características de rápido crecimiento y alto rendimiento. Las tendencias de crecimiento en algunas zonas de China meridional indican que, en condiciones normales de plantación, puede alcanzar la maduración de la madera entre los 15 y los 20 años. Recientemente, gracias al cultivo intensivo, se ha logrado un crecimiento incluso más rápido; por ejemplo en Huanghu, provincia de Hubei, la altura promedio de Metasequoia fue de 9,5 m, y el promedio de d.a.p. de 10,5 cm a la edad de 7 años. En la zona del río Hungai, Jiangdu, provincia de Jangsu, la altura promedio fue de 7 m y el promedio de d.a.p. fue de 11,2 cm a los cuatro años. Si las condiciones del lugar lo permiten, y con medidas de cultivo intensivas, se puede acelerar el período de maduración llevándolo a 10 15 años.

Los expertos forestales chinos han acumulado conocimientos técnicos y experiencias a través de prácticas de larga data en cuanto a manejo de esta especie. La cultivación de plantones sembrados se realiza emplazando viveros en una zona llana, con conveniente riego y drenaje, en suelo arenoso fértil y suelto. Antes de sembrar es necesario preparar con cuida do el terreno. La siembra tiene lugar de fines de marzo a la primera mitad de abril, cuando la temperatura del suelo es superior a 12 °C. Después de sembrar, se necesita frecuente riego. Se debe evitar el alternarse de sequedad y humedad, y los plantones deben tener sombra suficiente.

La cultivación de plantones por estacas es, hasta ahora, la mejor forma de reproducción de Metasequoia, porque hay muy pocos árbolesmadre, que producen poca semilla; de hecho, el cultivo en viveros sembrados no puede satisfacer las necesidades de la repoblación forestal en gran escala.

En la actualidad, el método preferido es la preparación de estacas en primavera, empleando ramas maduras y sanas.

La corta de estacas se puede hacer a principios del verano (en los últimos diez días de abril) en el caso de los retoños; a principios del otoño en el de las ramas terminales y semimaduras, y a fines del otoño (segunda mitad de octubre y primera de noviembre) en el de las ramas casi maduras.

Tratando la parte inferior de las estacas con una solución de ácido naftilacético antes de cortarlas, se acelera la aparición y proliferación de las raíces y su índice de crecimiento.

En la repoblación forestal, el espaciado no debe ser demasiado estrecho. En las zonas amplias se puede usar un espaciado de 2 x 3 m, y plantando en hilera se puede adoptar un espaciado de 2 m. Es mejor usar plantones de dos a tres años, desde fines de otoño hasta comienzos de primavera. El índice de supervivencia es comparativamente alto si la plantación se realiza al final del invierno. A partir de entonces, se requieren cuidados tempestivos y podas.


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