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3.3.5.1. Introducción
Cuando se desarrolla una idea, cualquiera sea su naturaleza, uno de los aspectos que siempre deben plantearse es la visión de futuro que se tiene de la actividad que resultará de tal idea. Normalmente, en el desarrollo de una microempresa la visión de futuro es limitada porque se está restringido a un proyecto de naturaleza muy pequeña. Sin embargo, se debe tener presente que es la visión de futuro de cualquier actividad del hombre lo que lo motiva a enfrentarse a dificultades, problemas y fracasos y continuar luchando por vivir.
3.3.5.2. La acción motivada
Cada acción que el ser humano realiza, está motivada por la luz al fondo del túnel, por una estrella que simboliza los más profundos anhelos respecto de cada cosa que realiza. Para el caso de las microempresas agroindustriales rurales la situación no es diferente. Se sabe exactamente cuál es el comienzo del proyecto, es decir, de qué dimensiones es y qué actividades realizará, pero raramente se tiene una visión de los que la empresa será en 10 o más años. Esto es una necesidad que debe ser satisfecha como una forma de incentivo al trabajo y como una manera de planificar orgánicamente el desarrollo. Muchas microompresas crecen inorgánicamente y por lo tanto crean tumores internos que no pueden controlar y terminan por destruirlas. El crecimiento debe ser orgánico y una buena manera de sistematizar el crecimiento es tener una planificación adecuada de corto, mediano y largo plazo.
Las motivaciones que mueven a un ser humano a actuar de una forma determinada son muy variadas. Es ideal que los grupos que conforman estas microempresas tengan motivaciones parecidas, o que puedan complementarse. Motivaciones muy disímiles podrán causar dificultades muy importantes en el desarrollo de las microempresas.
3.3.5.3. La visión de futuro, una meta real
Cuando se crea una visión de futuro en forma artificial se tiende a ser muy pragmático y a pensar que los sueños no podrán constituir jamás metas reales. Muchas voces la visión que uno tiene del futuro de una actividad está limitada por nuestros propios límites y ellos impiden que se desarrollen todas las potencialidades y las capacidades de los hombres.
Hay ejemplos en la historia que muestran que en circunstancias especialmente difíciles ciertos hombres han desarrollado proyectos de futuro que les han permitido salir adelante cuando las probabilidades de éxito eran casi nulas.
Es esta visión de futuro la que se debe transformar en nuestra meta real, en el fin último por el cual se realizarán todos los esfuerzos necesarios para alcanzar el nivel de vida deseado.
El aprender a desarrollar un proyecto de futuro es parte del desarrollo de las capacidades que comentamos en los puntos anteriores, es decir, la capacidad de crear una planificación de acuerdo a los recursos disponibles y basados en tal planificación crear una visión de futuro, es algo que se aprende, que se entrena y que de desarrolla sistemáticamente.