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Informes sobre la producción


Madera blanda aserrada
Planchas de Fibra

Madera blanda aserrada

La situación de la oferta y la demanda en 1949 por lo que hace a madera blanda aserrada puede describiese como una situación de "estabilización temporal", pero no es posible dar a conocer de manera cabal el panorama completo mediante tal generalización. El comercio y el consumo han mostrado una tendencia cada día mayor a volverse regionales. Por ejemplo, únicamente un 10 por ciento de las exportaciones europeas de madera blanda aserrada fué a parar en 1949 a mercados no europeos, en contraste con un 17 por ciento en 1947. En forma similar, la cantidad de madera blanda aserrada enviada por el Canadá y los Estados Unidos a otros mercados bajó del 74 por ciento del total de exportaciones en 1947 a un 47 por ciento en 1949. Si bien la Unión Soviética mostró más actividad en el mercado de exportación en 1949 que en otros años de la postguerra, ello no fué suficiente para alterar la situación en forma apreciable.

En Europa, el aumento de los abastecimientos se mantuvo a la par con la demanda efectiva en varios países, pareciendo indicar un equilibrio general. Sin embargo, en el Reino Unido y algunos otros países importadores el consumo se ve limitado por factores que no pueden ser considerados como normales. Uno de los principales países importadores, o sea Alemania, apenas si empieza a figurar ahora entre la lista de compradores. Por otra parte, ano con el impulso dado a la producción para exportación por la tendencia firme o en aumento de los precios, la capacidad de exportación de los Países Escandinavos y del este de Europa es limitada. A la larga, por lo tanto, el equilibrio entre los abastecimientos y los niveles de consumo que son de desearse no podrá lograrse en Europa sin la ayuda de abastecimientos de consideración procedentes de la Unión Soviética y, por lo menos, embarques marginales de la América del Norte y, con el tiempo, de la América del Sur. Los planes de exportación de la Unión Soviética son desconocidos y las importaciones actuales que se realizan de zonas de influencia del dólar se facilitan en forma artificiosa, es decir, mediante créditos o donativos en dólares. Si bien la madera aserrada de procedencia rusa está considerada como de muy alta calidad, no es insubstituible, pero en cambio, sería difícil encontrar substitutos para algunos tamaños de maderas de Norte América. Del total de dólares para el cual la Administración de Cooperación Económica había expedido autorizaciones para adquirir artículos hasta fines de noviembre de 1949 (7,600 millones de dólares) únicamente un poco más del uno por ciento (108.8 millones de dólares) había sido autorizado para importaciones de madera aserrada o sus productos. El programa formulado para 1950 para los países que reciben ayuda del Plan Marshall, o sea el Programa de Recuperación Europea, provee una disminución en las importaciones procedentes de los Estados Unidos y el Canadá.

La reforzada posición de los exportadores de madera aserrada del norte de Europa, por una parte, y la vacilación obvia del Reino Unido para aceptar los precios exigidos, por la otra, motivaron que el mercado de exportación se iniciara en Europa en 1950 con una relativamente lenta actividad adquisitiva por parte de la Gran Bretaña. Todavía existe un gran desnivel entre los abastecimientos hasta hoy contratados por el Reino Unido y las necesidades estimadas para todo el año de 1950. Pudiera ser, sin embargo, que el nivel de precios de la madera blanda aserrada a que se había llegado en Europa a principios del segundo trimestre de 1950 resultara atractivo para los países del este de Europa y quizá también para la URSS. Una contradicción importante en la tendencia a la regionalización mostrada por el comercio de la madera lo constituyen las exportaciones de madera aserrada hechas por el Brasil al Reino Unido en 1950.

En el Canadá y los Estados Unidos se ha registrado durante los últimos dos años una fuerte demanda doméstica por madera suave aserrada, debido al auge que ha tenido la construcción de edificios y alto nivel alcanzado por la producción industrial, lo cual ha traído por resultado un nivel de precios relativamente satisfactorios para los productos de madera aserrada. Los Estados Unidos han demostrado su capacidad para absorber una proporción cada vez mayor de los abastecimientos exportables de madera aserrada del Canadá, y la correlación entre los mercados de ambos países ha mostrado una tendencia a ser cada día más estrecha.

La industria aserradora canadiense depende del comercio de exportación para dar salida a un 40 a 50 por ciento de su producción total. Con anterioridad a la guerra, de un 25 a un 30 por ciento de estas exportaciones se hacían a los Estados Unidos, y aproximadamente de un 45 a un 55 por ciento al Reino Unido. En 1948 y en 1949, de 63 a 65 por ciento de las exportaciones se efectuaron a los Estados Unidos y únicamente el 33 por ciento fué para el Reino Unido. Pero como el estar supeditado en grado considerable a una sola fuente de salida puede fácilmente verse afectado por las fluctuaciones generales de los negocios, implicando muy serios riesgos, se considera muy importante para la industria aserradora canadiense que se encuentren los medios de mantener y, de ser posible, aumentar las exportaciones a los mercados tradicionales de ultramar.

Las perspectivas para el resto del año de 1950 se ven con optimismo tanto por lo que se refiere al Canadá como a los Estados Unidos, ya que las actividades de construcción prometen conservar su elevado nivel actual. En vista de una mayor demanda que se calcula habrá de presentarse durante el segundo y tercer trimestres del año, existe aún la posibilidad de que los abastecimientos de madera aserrada resulten insuficientes en los Estados Unidos.

La escasez de divisas ha afectado también el comercio de los países latinoamericanos importadores de madera que han devaluado sus monedas. No se dispone de información exacta respecto a la situación actual de la oferta y la demanda, pero parecen existir indicaciones de una ligera baja en el comercio de madera. El principal exportador de dicha región, o sea Brasil, no ha devaluado su cruzeiro, y en consecuencia encuentra mayores dificultades para competir en el mercado extranjero.

Respecto a Oceanía y el Lejano Oriente, la situación en Australia parece revelar una fuerte demanda de madera aserrada en dicho país. Se espera poder satisfacer las necesidades mediante la producción doméstica e importaciones que gradualmente van aumentando. Los planes de Nueva Zelandia para el aprovechamiento de sus recursos forestales proveen un aumento radical en la producción de madera blanda aserrada durante los próximos años, con el resultado de que aumentarán considerablemente en volumen los abastecimientos para exportación. Durante la siguiente década, este desarrollo de Nueva Zelandia puede llegar a ser uno de los acontecimientos más interesantes que emanen de la moderna política forestal que se sigue en esta región. Los excedentes exportables de madera aserrada, en perspectiva en Nueva Zelandia, pueden muy bien ser de importancia cada vez mayor para otros países de esa región deficitaria.

El gran mercado potencial para maderas blandas que existe en el Japón no da señales de abrirse durante 1950.

EUROPA

Consumo

Los datos proporcionados a la FAO por 20 países europeos* revelan un aumento de un 10 por ciento en el consumo de madera aserrada entre 1947 y 1948. En 1949, el consumo parece haberse elevado todavía más, a juzgar por los informes preliminares, estimándose el consumo para la totalidad de países europeos en unos 7.5 millones de standards. En comparación con un promedio o consumo "normal" de 9.7 millones de standards en los años anteriores a la guerra, el volumen todavía muestra una disminución general. Sin embargo, los datos relativos al consumo durante el año pasado presentan un panorama variable de "anormalidad" en distintos países.

* Los principales países no incluidos en estas estimaciones fueron Albania, Bulgaria, España, Rumania y la Zona Soviética de Alemania.

Entre los principales países importadores, Bélgica, Italia y los Países Bajos experimentaron un aumento en la demanda, que se vió equilibrado por abundancia de abastecimientos.

En los Países Bajos, tanto las actividades de construcción como la industria de embalaje y envases absorbieron mayores cantidades de madera. En vista de que los abastecimientos eran adecuados, se suprimieron los controles de precios de la madera a principios de 1950. Los comerciantes holandeses en maderas iniciaron una campaña de propaganda para recuperar los campos en los cuales se venían utilizando materiales substitutos durante el período de escasez.

En Bélgica la situación en 1949 fué un tanto similar a la de los Países Bajos. Las actividades de la construcción ascendieron en más de un 50 por ciento del volumen de 194X, siendo satisfactorio el nivel alcanzado por la producción industrial. Sin embargo, el consumo de madera blanda aserrada aparentemente descendió más abajo del nivel de 1948. Lo anterior se atribuye principalmente a un uso mayor de materiales substitutos en las actividades de construcción así como a la racionalización en el uso de la madera como material de construcción, más bien que a limitaciones de los abastecimientos.

Las actividades de la construcción en Italia adquirieron también auge durante 1949, especialmente hacia fines del año, y con tal motivo aumentó la demanda de madera. Lo adecuado de los abastecimientos dió la impresión de haberse iniciado la transición hacia una etapa más o menos normal.

En el Reino Unido, el consumo de madera blanda aserrada mostró una tendencia a estancarse en un nivel "anormal". Las actividades de construcción, que están controladas por el gobierno, no llegaron a alcanzar el nivel de 1948, pero la demanda para fines de construcción así como para envases continuó siendo fuerte. El mercado de la madera blanda aserrada se mantuvo estable, con algunas ligeras características favorables al comprador, pero el nivel de actividades fué bajo si se le compara con el de antes de la guerra. El consumo del Reino Unido de madera blanda aserrada fué aproximadamente 1,100,000 standards en 1946, 1,000,000 en 1947, y aproximadamente 1,200,000 en 1948. La cifra correspondiente a 1949 fué más o menos la misma que la de 1948. Esta cantidad es considerablemente más baja que el "mínimo de austeridad" de 1.5 millones de standards, estimado para 1949 a principios de dicho año por un comité investigador (Keith Price Committee) designado para estudiar las probables necesidades y abastecimientos de madera y madera multilaminar en el período 1949-53. El consumo del país en los años anteriores a la guerra por lo que hace a madera blanda (excluyendo durmientes de ferrocarril), ha sido fijado en unos 2.4 millones de standards anuales como promedio. Conforme al Estudio Económico para 1950, dado a conocer por el gobierno, el nivel de la construcción de viviendas habrá de restablecerse de 180,000 unidades, aproximadamente, a 200,000 unidades, lo cual se calcula que requerirá abastecimientos adicionales de madera blanda aserrada por la cantidad de 30,000 standards.

De Francia se informa que las actividades de la construcción de edificios aumentaron un tanto en 1949. A pesar de ello, y del hecho de que la producción industrial mostró señales definidas de recuperación, el consumo de madera en este país también parece haberse estancando en un nivel relativamente bajo. En y 1948 el consumo anual de madera blanda aserrada llegó a unos 780,000 standards. El bajo nivel de consumo vino acompañado de un aumento en el uso de materiales substitutos, estimándose que esta situación habrá de continuar.

En Suiza la demanda de madera mostró una tendencia a disminuir, especialmente durante los últimos meses de 1949. Esto motivó cierta alarma, habiéndose notado que aquí también el bajo nivel de consumo se debía al uso de substitutos para fines de construcción y usos industriales. Los abastecimientos fueron abundantes en relación con la demanda.

En Austria se informó que las actividades de construcción aumentaron ligeramente en 1949. La demanda de madera fué constante, pero la tendencia de los precios a subir restringió el consumo. Sin embargo, el consumo de madera blanda aserrada en todo el país aumentó ligeramente.

En los países exportadores del norte, la tendencia de consumo domestico de madera en 1949 fué variable de un país a otro. En Suecia un aumento en las actividades de construcción (4 por ciento mayores que las de 1948) y mayores necesidades de las industrias de embalaje y envases son indicaciones de un aumento en el consumo de madera en relación con el año anterior. En Finlandia, también aumentó ligera mente la actividad de construcción (18 por ciento sobre la base del número total de cuartos), y es de presumirse que el consumo de madera también haya aumentando. Se estima que la industria de la construcción de Noruega absorbió unos 325,000 standards en 1949. Lo anterior representa un aumento sobre el consumo de 1947 y 1948 que ascendió a 282,000 y 288,000 standards, respectivamente.

En general, si bien el consumo en el Reino Unido y en Francia se mantuvo en un nivel relativamente bajo, en varios países de la Europa Occidental y Central se estimó que el consumo de madera podía y debía ser aumentado limitando el uso de materiales substitutos.

A principios de 1950 se notó una ligera tendencia ascendente en el consumo de madera tanto en los países exportadores como en los importadores.

Producción

Como resultado de una favorable temporada de cortes en casi todos los países productores durante 1948-1949, una demanda estabilizada y firmeza en los precios, la producción europea de madera blanda aserrada aumentó en unos 600,000 standards, aproximadamente, en 1949, o sea, un 9 por ciento, habiendo alcanzado unos 7.5 millones de standard, aproximadamente (véase la Tabla 1).

Tabla 1. - Producción y comercio de madera blanda aserrada (1948 y 1949)

Países

Producción

Importaciones

Exportaciones

1948

a1949

1948

a1949

1948

a1949


(Millares de standards)

EUROPA

b6,070

b6,670

b1,770

b2,150

b1,610

b2,040

Países importadores

b2,540

b2,880

b1,730

b2,120

b200

b200


Bélgica

58

34

104

93

2

...


Dinamarca

62

75

144

153

-

...


Francia

1642

1663

150

94

58

63


Alemania:









Bizona

1,023

1,341

9

82

76

72



Zona Francesa

249

2240

...


73

...


Grecia

7

9

338

348

-

...


Irlanda

6

6

30

58

-

...


Italia

153

170

72

157

-

-


Luxemburgo

3

1

1

8

1

1


Países Bajos

3

3

278

325

-

...


Suiza

268

268

17

9

7

1


Reno Unido

465

465

883

1,095

3

...

Países exportadores

b3,530

b3,790

b40

b30

b1,390

b1,840


Austria

269

468

3

7

104

262


Checoeslovaquia

2,3,5518

2,3,5496

...

...

668

624


Finlandia

810

850

...

...

488

605


Noruega

3310

3330

16

10

10

15


Polonia

561

...

...

...

37

85


Portugal

128

128

2

2

24

15


Rumania

...

...

...

...

4

626


Suecia

928

950

18

15

556

656


Yugoeslavia

...

...

...

...

2101

154

U R.S.S

...

...

...

...

655

6131

NORTE Y SUDAMERICA








Brasil

376..

...

1

...

202

...


Canadá

2,980

2,917

11

18

1,170

1,066


Estados Unidos

14,300

13,200

7841

7728

8240

8257

OTROS PAÍSES








Australia

101

...

79

...

-

...


Japón

1,768

...

-

...

1

...


Nueva Zelandia

227

...

4

...

11

...

a Preliminar.

b Totales comparables únicamente respecto a los países anotados

... No se dispone de información

- Nada o cantidades insignificantes.

1 No incluye madera aserrada producida de trozas para aserrar importadas do Alemania.

2 Enero a septiembre únicamente.

3 Se incluyen maderas duras.

4 No se incluyen maderas para mina, aserradas, o madera aserrada producida con trozas de aserrar importadas.

5 Se incluyen durmientes de ferrocarril.

6 Cantidades estimadas de informes rendidos por los países importadores.

7 No se incluyen importaciones de tabletas (tejamanil).

8 No se incluyen exportaciones a las posesiones y territorios.

En los tres países Escandinavos, la producción de madera blanda aserrada mostró aumentos. Esto se atribuye, además de las diversas razones ya mencionadas, en parte a un fuerte impulso por aumentar las exportaciones y en parte a haberse destinado para los aserraderos trozas de cortas dimensiones que por lo general se destinan a la elaboración de pasta.

En la Europa Central, el mayor aumento proporcional de la producción tuvo lugar en Austria, país en el cual la producción de madera blanda aserrada aumentó en un 74 por ciento. En Francia, Alemania y Suiza, las actividades de los aserraderos fueron estimuladas, en parte debido a la necesidad de rescatar madera dañada por los incendios de los bosques de Landas y la plaga del escarabajo de la corteza en Francia, y las plagas de insectos y la sequía en Alemania y Suiza.

A juzgar por informes de que se dispone, en Suecia y Finlandia deberá aumentar la producción de trozas durante la temporada 1949/50, en tanto que disminuirán los cortes de madera para leña y madera rolliza de tamaño corto. En Noruega es probable que los cortes no alcancen a satisfacer la demanda. Por lo tanto, las importaciones de madera blanda aserrada pudieran aumentar durante 1950.

En abril de 1950, en su discurso de apertura del sexto período de sesiones de la Comisión Económica para Europa, el Secretario Ejecutivo señaló que la información disponible no permitía pronosticar un gran aumento de producción en los países europeos que actualmente abastecen el mercado, durante 1950. Por el contrario, se teme que ocurra una disminución de los niveles alcanzados en 1949 por lo que hace a este continente.

Exportaciones

La tendencia de las exportaciones de madera blanda aserrada durante los últimos tres años (1.4 millones de standards en 1947, 1.6 millones en 1948 y 2.0 millones en 1949) ha sido satisfactoria y de acuerdo con los pronósticos formulados durante la Conferencia de Marianske-Lazné celebrada en 1947.

En 1948 Suecia y Finlandia exportaron en conjunto más de un millón de standards. En 1949 sus exportaciones conjuntas fueron de 1.26 millones de standards, o sea un 60%, aproximadamente, de todas las exportaciones de países europeos. En ambos países, así como también en Noruega, las condiciones poco estables de los mercados de la pasta durante el primer semestre de 1949 contribuyeron a estimular el movimiento de exportación en el mercado de maderas

En la Europa Central los hechos más salientes fueron la ligera disminución de las exportaciones procedentes de la Alemania Occidental y el aumento de un 150 por ciento registrado por las exportaciones de Austria.

En tanto que las exportaciones de Checoeslovaquia bajaron en 1949, las de Polonia y Yugoeslavia subieron. Uno de los acontecimientos más importantes en el comercio de la modela aserrada fué el aumento al doble de las exportaciones de la URSS sobre la cantidad correspondiente a 1948; sin embargo, el volumen de madera aserrarla exportada por Rusia y recibida por los países importadores no llegó al 10 por ciento de las cantidades correspondientes a 1937 (1.4 millones de standards).

Muchos contratos para embarques durante 1950 de madera de los Países Escandinavos fueron concertados desde fecha temprana. Esta circunstancia, y la tendencia a la firmeza manifestada por los precios se cree que vendrá a estimular una mayor actividad en las exportaciones de estos países. Durante el período de sesiones celebrado en abril de 1950 por el Comité de la Madera de la Comisión Económica para Europa (ECE), Suecia anunció que sus perspectivas máximas de exportación durante 1950 serían probablemente de unos 625,000 standards.

Según se informa, ya para la tercera semana de abril de 1950 Suecia había vendido unos 470,000 standards a mercados distintos al del Reino Unido, no habiéndose llegado a un acuerdo sobre los precios con este último país. Se consideró casi seguro que la cantidad de 250,000 standards fijada en el convenio comercial con el Reino Unido no iba a poderse obtener de las entregas que se hiciesen durante el resto del año. A la fecha, únicamente 23,500 standards de madera aserrada ha sido vendida por Suecia al Reino Unido, habiéndose celebrado contratos para la entrega de algunos millares más de standards.

Conservadoramente, Finlandia manifestó al Comité de la Madera de la ECE que las cantidades máximas disponibles para la exportación durante el presente año ascenderían a 600,000 standards. A principios de febrero de 1950, sus contratos con los Países Bajos, Bélgica, la Alemania Occidental, Dinamarca, Francia, Irlanda y Egipto eran tres veces mayores que los del período correspondiente del año anterior. El convenio con el Reino Unido estipula entregas de 225,000 standards. Como resultado de la iniciación favorable de los embarques y de la firmeza de los precios, se consideró probable que el total de las exportaciones realizadas en 1949 haya pasado de 605,000 standards.

Las exportaciones de madera blanda aserrada procedentes de Austria durante 1950 se cree que serán iguales o superiores a las realizadas en 1949. Las exportaciones de Alemania deberán descender a un nivel comparativamente bajo en 1950, desapareciendo totalmente para 1951. Para fines de 1950, Francia habrá dispuesto probablemente de la mayor parte de sus abastecimientos de madera blanda aserrada disponible para la exportación como resultado de los incendios de los bosques de Landas y de los ataques de las plagas de insectos.

Bajo las estipulaciones de un convenio celebrado con el Reino Unido, Yugoeslavia deberá embarcar anualmente 150,000 standards de madera blanda aserrada a la Bretaña durante el período 1950-54. Se informa que para mediados de mayo la Comisión Británica de Control de la Madera había contratado la adquisición de 130,000 standards. El Comité de la Madera de la ECE ha estimado que las exportaciones conjuntas de madera blanda aserrada procedentes de Checoeslovaquia, Rumania, Yugoeslavia y Polonia, tanto en 1950 como en 1951, ascenderán a una cantidad que habrá de fluctuar entre 175,000 y 275,000 standards.

Con relación a la URSS, nada se sabe respecto a sus planes definitivos de exportación en la fecha en que escribimos. A principios de junio, la Comisión Británica de Control de la Madera había iniciado negociaciones en Moscú respecto a adquisiciones de madera aserrada y en los círculos comerciales británicos se confiaba en que estas habrían de resultar en la contratación de cantidades de importancia (quizá 200,000 standards o más).

El Comité de la Madera de la ECE estimó que el total de los abastecimientos disponibles para exportación en Europa en 1950 llegaría de 1.9 a 2.3 millones de standards y de 1.8 a 2.2 millones en 1951. En 1949, se embarcaron a ultramar cantidades algo mayores de 100,000 standards.

Importaciones

Las importaciones de madera blanda aserrada hachas por países europeos de fuentes europeas, alcanzaron en 1949 un total de 1.9 millones de standards en contraste con 1.4 millones en 1948. Las importaciones procedentes de ultramar bajaron de 360,000 standards en 1948 a unos 280,000 standards en 1949.

Las importaciones totales del Reino Unido ascendieron a 1,095,000 standards. Aún cuando mayor que la cantidad de 883,000 standards importada durante 1948, en círculos comerciales se consideró como totalmente inadecuada la cantidad importada en 1949, ya que ella fué apenas un 50 por ciento de lo importado en 1937. Debe hacerse notar que el aumento en las importaciones de madera aserrada se vió contrarrestado por una disminución de 590,000 m³ en las importaciones de trozas para aserrar (principalmente de Alemania), o sea una cantidad de trozas suficiente para producir 70,000 standards de madera aserrada. Las compras británicas en Finlandia Suecia, Yugoeslavia, Polonia, Rumania y muy especialmente en la URSS, aumentaron considerablemente sobre las correspondientes a 1948, en tanto que las importaciones procedentes de Canadá bajaron de 264,000 standards en 1948 a 218,000 en 1949. Las importaciones procedentes de E.U.A. fueron insignificantes (29,000 standards), en tanto que las importaciones procedentes de Alemania llegaron a 89,000 standards. Muchos otros países tradicionalmente importadores de madera blanda aserrada, especialmente los Países Bajos, Dinamarca, Irlanda e Italia, aumentaron en 1949 sus importaciones. En cambio Bélgica, Francia y Suiza redujeron éstas. Parece que las importaciones de la Alemania Occidental alcanzaron un total de 82,000 standards (10,000 en 1948), consistentes en más de 65,000 standards de Suecia, más de 22,000 de Finlandia y el resto de los Estados Unidos.

Se estima que muy pronto Alemania se convertirá en un fuerte competidor de otros países en la compra de madera en los Países Escandinavos En 1950, la Alemania Occidental, al igual que Dinamarca los Países Bajos y Bélgica, entró al mercado para concertar contratos de madera aserrada en Suecia y Finlandia desde fecha muy temprana. Este "ímpetu de compras" se atribuye entre otras cosas, al mejoramiento general de la situación económica en los países adquirientes y en algunos casos a la abolición de los controles gubernamentales.

A falta de competencia rusa en las exportaciones de madera y como resultado de la devaluación de las monedas y de la reducción de las importaciones pagaderas en dólares, los países europeos importadores han venido a depender en forma más marcada de los Países Escandinavos para obtener sus abastecimientos de madera. Re considera que el Reino Unido, tradicional mente el país importador más importante en el mundo, podría desarrollar su plan "austero" de importaciones fijado en 1.05 millones de standards, aumentando sus importaciones de Polonia, Yugoeslavia, la URSS y el Brasil y manteniendo sus compras en zonas de influencia del dólar al nivel del año anterior, aún cuando los embarques procedentes de los Países Escandinavos, especialmente Suecia, se vean restringidos. Para fines del primer trimestre de 1950, las importaciones de madera aserrada llevadas a cabo por el Reino Unido ascendían únicamente a 93,600 standards. Esta cantidad es menor en 49,000 standards a la correspondiente al primer trimestre de 1949, y en 87,000 standards a la correspondiente a igual periodo en 1948. Los embarques del Canadá bajaron durante este primer trimestre de 25,800 standards en 1949 a 5,000 en 1950; los de Alemania, de 37,000 a 3,600; y los de Estados Unidos, de 5 000 a menos de 500 standards. De Rumania no se recibieron embarques durante los primeros tres meses de 1950, en contraste con 5,500 standards recibidos, durante el mismo período de 1949. Se informa que el Reino Unido ha contratado entregas durante 1950 de 40,000 standards del Brasil, unos 155,000 standards del Canadá y los Estados Unidos y 60,000 de Francia. Probablemente para cuando esta publicación llegue a manos del lector, ya se sabrá si los aumentos en las compras de madera del Reino Unido en la URSS se han realizado.

Se cree que el total de las necesidades europeas de importación llegará aproximadamente al nivel de las importaciones efectivas realizadas en 1949.

Precios

En el mercado de exportación, los precios de la madera blanda aserrada, que se habían mantenido más o menos estables desde los principios del segundo trimestre de 1949, principiaron a dar muestras de una tendencia ascendente hacia fines del año. En los países exportadores del norte, la demanda de precios más elevados para la madera aserrada de exportación fué motivada por un alza general en los costos de producción, atribuible a la devaluación de las monedas, el descenso en los precios de la madera para pulpa y una hoja en la demanda de desperdicios de aserradero. Los aserradores de los Países Escandinavos dependen en parte de la capacidad de las fábricas de pasta para absorber y pagar el costo de los desperdicios provenientes del aserradero de la madera. La importancia de esta interrelación se hace evidente, si se considera que un estancamiento durante un mes en las fábricas finlandesas de pasta al sulfato significaría la reducción en el consumo de madera correspondiente al volumen de desperdicios que resulten al elaborar unos 100,000 standards de madera aserrada. En Suecia la base del cálculo es el hecho de que aproximadamente la mitad de la madera empleada en los aserradores se convierte en desperdicio. Para ser más precisos, se requieren cerca de 310 pies cúbicos de madera para producir 165 pies cúbicos, o sea un standard, de madera aserrada.

Por otra parte, una activa demanda de madera aserrada se vió estimulada por la cancelación de medidas reglamentarias que afectaban el comercio particular en diversos países, tales como los Países Bajos, Dinamarca, y, desde el primero de abril de 1950, Irlanda. En estos y en algunos otros países - por ejemplo Bélgica y Alemania Occidental - los importadores se mostraron ansiosos de asegurar grandes cantidades de madera seleccionada de primera calidad desde principios de la temporada, estando conformes en aceptar las exigencias de precios de los Países Escandinavos.

Como resultado de lo anterior, los precios para las calidades mejores y las dimensiones de mayor demanda de la madera aserrada de Escandinavia hubieron de subir. Los precios de apertura en 1950 para duela de pino gigantesco de siete pulgadas fueron en Bélgica de £46.10 ch. a £50, f.o.b. por standard (en 1949 £47.10 ch.), y los de tablón de pino gigantesco de 7 pulgadas fueron de £62 a £65 (en 1949 £57 a £60). la precios de quintos de duela de pino gigantesco de siete pulgadas, se mantuvieron en cambio al mismo nivel que el año anterior, habiendo bajado ligeramente los de quintos de tablones de pino gigantesco de 7 pulgadas. Los importadores holandeses, en competencia con los compradores belgas, pagaron de £2 a £3 más por standard que el año anterior por las maderas finlandesas de buena calidad. Dinamarca ha incluido madera en beato y madera aserrada (con excepción de tablones cepillados) en su lista de productos respecto a los cuales las importaciones de los países que reciben ayuda de la Administración de Cooperación Económica han quedado menos restringidas a partir del 10 de marzo de 1950. Esta lista la está aplicando también respecto a importaciones procedentes de Finlandia, que no es miembro del grupo de países incluidos en la ECE. En consecuencia, los precios daneses para la madera de Suecia y Finlandia ya no serán fijados por convenios que abarquen todo el año.

En febrero de 1950 la Comisión Británica de Control de la Madera llegó a un acuerdo con los exportadores finlandeses respecto a precios para las maderas de baja calidad considerada en los grupos IV, V y VI, que se supone representan más de la mitad de las exportaciones finlandesas de madera aserrada al Reino Unido. Los precios para las maderas en los grupos superiores quedaron sujetos a posteriores negociaciones. Los precios finlandeses para 1950 así fijados, mostraron los siguientes aumentos sobre los precios de 1949:

Duela de pino gigantesco de siete pulgadas precio f.o.b.


1950

1949

Aumento

U/S


Grupo IV

£44. 0.0

£40. 0.0

£4. 0.0


Grupo V

£43. 5.0

£39. 5.0

£4. 0.0


Grupo VI

£42. 15.0

£38. 15.0

£4. 0.0

Quintos


Grupo IV

£39. 10.0

£36. 15.0

£2. 15.0


Grupo V

£39. 0.0

£36. 5.0

£2. 15.0


Grupo VI

£38. 15.0

£36. 0.0

£2. 15.0

Se informa que de 15,000 a 20,000 standards de madera aserrada finlandesa que corresponde a los grupos superiores han sido contratados por el Reino Unido sobre los precios de base de £45 10 ch para duela de pino gigantesco de siete pulgadas y £40 10 ch para quintos de pino gigantesco de siete pulgadas en el Grupo II, y 10 ch. menos para el grupo III, precios netos f.o.b. Estos precios muestran un aumento de £4 10 ch. para duela de pino gigantesco u/s y £3 5 ch. para quintos de pino gigantesco.

Para principios de abril se informó que los exportadores de Suecia habían realizado ventas a mercados fuera del Reino Unido a precios que corresponden a una base de £51 o más por duela de pino gigantesco de siete pulgadas u/s precio neto f.o.b. Habiéndose creado una tensión sumamente intensa entre los precios de exportación y los precios del mercado doméstico, el control de precios de la madera para el mercado doméstico fué abolido en Suecia el 13 de marzo.

No fué sino hasta fines de abril cuando la Comisión Británica de Control de la Madera llegó a un acuerdo con un exportador sueco individual respecto a precios para el embarque de 23,500 standards. Estos precios, cotizados c.i.f., mostraron un aumento de £5 para duelas de pino gigantesco de siete pulgadas u/s y de £3 para duela blanca de siete pulgadas, y de £4 a £5 para quintos de pino gigantesco. Se confiaba en que este contrato había de ser seguido por nuevas compras de madera aserrada de Suecia, pero para mediados de mayo sólo se habían realizado contratos de muy poca importancia.

Los precios para embarques de madera de Yugoeslavia al Reino Unido en 1950, según se informa, excederán de los precios c.i.f. de 1949 por unas £4 a £5 por standard.

El precio de base para el pino del Paraná contratado en el Brasil por el Reino Unido es el de £53, f.o.b., según se informa

AMÉRICA DEL NORTE

Canadá

Consumo

El consumo de madera aserrada se vió afectado en 1949 por una actividad sin precedente en el campo de la construcción. Según datos preliminares, el valor total de los contratos de edificación y de construcción otorgados monta a la cantidad de 1,400 millones de dólares canadienses, en comparación con 954 millones en 1948.

Se espera que la demanda doméstica de madera aserrada igualará en 1950 o aún excederá ligeramente de la correspondiente a 1949. Se confía en que la ayuda económica proporcionada por el Gobierno Federal habrá de estimular la construcción de mayor número de unidades de viviendas que las construidas en 1949 y que una tendencia ascendente similar se habrá de observar en otras clases de construcción.

Producción

La producción de madera blanda aserrada ascendió en 1949 aproximadamente a 2.92 millones de standards, o sea una disminución de cerca de un dos por ciento de la producción de 1948 que fué de 2.98 millones de standards. En la Columbia Británica la producción de madera blanca aserrada bajó un 4.2 por ciento del nivel de 1948, y la producción de maderas blandas y maderas duras en las otras provincias, a excepción de Terranova, bajó un 6.8 por ciento.

La costa oeste de la América del Norte sufrió los efectos de las inclemencias del tiempo en enero de 1950, pero la producción de madera blanda aserrada se reposo en febrero en la Columbia Británica, y la correspondiente a los dos primeros meses del año fué únicamente un 4 por ciento menor que la de 1949. En las otras provincias, a excepción de Terranova, la producción total durante los primeros dos meses fué un 9 por ciento más baja que la correspondiente al mismo período del año anterior. Para el Canadá en general, la producción total durante este período fué 6 por ciento inferior a la del período correspondiente de 1949.

Comercio

Las exportaciones de madera blanda aserrada realizadas en 1949, excluyendo tejamanil, ascendieron aproximadamente a 1.07 millones de standards o sea alrededor de un 37 por ciento del total de la madera blanda producida. Los Estados Unidos constituyeron el mercado principal, habiendo adquirido cerca de 670,000 standards, o sea el 63 por ciento del total; el Reino Unido adquirió aproximadamente 236,000 standards, o sea un 22 por ciento del total.

Durante el primer trimestre de 1950, las exportaciones canadienses de madera blanda aserrada, excluyendo tejamanil, subieron a 288,000 standards, o sea un, aumento de un 41 por ciento sobre el período correspondiente de 1949. Las exportaciones a los Estados Unidos continuaron en aumento en tanto que los embarques al Reino Unido continuaron decreciendo.

La baja de todas las exportaciones canadienses al mercado tradicional del Reino Unido motiva cierta preocupación. Más del 80 por ciento de estas exportaciones fueron financiadas con fondos de la Administración de Cooperación Económica durante los últimos nueve meses de 1948, correspondiendo un 50 por ciento por lo que hace a 1949. La disminución gradual de las ministraciones de dólares a los países incluidos en el Programa de Recuperación Europea, según está proyectada, puede traer consecuencias muy serias para el Canadá, a menos que puedan aumentarse las exportaciones a los Estados Unidos. Por lo que toca a la madera blanda aserrada, una eventual disminución en la demanda de madera aserrada en los Estados Unidos podría fácilmente afectar un gran sector de la industria canadiense aserradora de madera. El Gobierno Canadiense tiene en estudio planes generales tendientes a desviar hacia países europeos, principalmente el Reino Unido, importaciones por valor de varios centenares de millones de dólares que actualmente proceden de los Estados Unidos. Si estos planes llegan a realizarse, pudieran disminuir la repercusión de la terminación del Programa de Recuperación Europea (para 1952) sobre la industria aserradora de madera del Canadá.

Estados Unidos

Consumo

Condiciones climatéricas excepcionalmente favorables permitieron que continuara durante todo el año de 1949 la fuerte actividad en materia de construcción que se iniciara en agosto y septiembre. Según la Oficina de Estadísticas de Trabajo, las actividades de construcción de viviendas en todo el país establecieron nuevos records durante el cuarto trimestre del año, obteniéndose como resultado un total de 1,019,000 nuevas unidades de vivienda en zonas no rurales iniciadas durante 1949. De sumarse las casas construidas en las granjas, las casas prefabricadas, los remolques - viviendas y las casas reconstruidas, se estima que el total de nuevas unidades de vivienda ascendió en 1949 a más de 1,300,000, número que constituye un verdadero récord para un solo año. Considerada desde el punto de vista de su valor en dólares, la actividad en materia de construcción desplegada el año pasado no tiene precedente; el valor de las inversiones en nuevas construcciones llegó a 19,300 millones de dólares. De esta cantidad 14,000 millones corresponden a construcciones particulares y el resto a construcciones con fondos públicos.

La fuerte demanda de madera aserrada que se experimentó a fines de 1949 hizo subir el consumo anual de madera aserrada a un nivel relativamente alto. Se calcula que el consumo de madera blanda aserrada llegó en 1949 a 14.0 millones de standars, cantidad que se aproxima a la correspondiente a 1947 y es únicamente un 3 por ciento inferior a la de 14.4 millones de standards correspondiente a 1948.

Esta demanda continuó durante los primeros meses del presente año. Consideradas por su valor en dólares, las nuevas construcciones realizadas en el primer trimestre de 1950 fueron un 18 por ciento mayores que las del correspondiente período en 1949, habiendo establecido un nuevo récord para el trimestre. El consumo de madera blanda durante los tres primeros meses de 1950, se calcula en 3.45 millones de standards, creyéndose que el consumo durante el segundo trimestre pueda alcanzar a 4.1 millones de standards.

Producción

La producción de madera blanda aserrada en 1949 llegó aproximadamente a 13.2 millones de standards, o sea aproximadamente un 8 por ciento menos que la producción de 14.3 millones de standards en 1948.

A principios de año prevalecieron muy adversas condiciones de clima en muchas regiones importantes donde se produce madera blanda aserrada. Pero durante la primavera la producción aumentó considerablemente, habiendo alcanzado por lo que hace al primer trimestre de 1950 un total estimado en 3.0 millones de standards, o sea un 6.4 por ciento de aumento sobre el período correspondiente en 1949. La producción durante el segundo trimestre en los aserraderos pertenecientes a la Asociación Nacional de Productores de Madera Aserrada hacia principios de mayo era también superior a la alcanzada en 1949.

Sin embargo, ni las condiciones favorables de la producción ni la rebaja considerable de las existencias en las plantas, continuada durante el último trimestre de 1949 y el primero de 1950, fueron suficientes para igualar el aumento en la demanda. Para principios de mayo, en los círculos industriales se consideró que se observaban signos inequívocos de una próxima escasez de madera aserrada. Las previsiones generales fueron en el sentido de que durante los meses de verano la demanda sería superior a la oferta.

Precios

Como resultado de la fuerte demanda, el promedio de los precios de la madera aserrada para construcción registró aumentos constantes desde agosto de 1949 hasta enero de 1950. En la Tabla 2 presentamos la tendencia seguida por los precios de la madera blanda aserrada.

Tabla 2. - Indices de precios de madera blanda aserrada

Período

Pino del Sur

Abeto Douglas

Pino del Oeste

1948 - todo el año

345.0

375.8

338.0

1949 - todo el año

305.5

341.8

329.1

1948 cuarto trimestre

332.2

381.0

346.8

1949





tercer trimestre

297.4

332.1

321.9


cuarto trimestre

311.0

328.0

319.6

1949 - Enero

320.3

359.8

340.7

1950 - Enero

314.6

330.9

323.8

Fuente: Secretaría de Comercio de E.U.A.

La tendencia ascendente de los precios de la madera aserrada continuó durante todo febrero y marzo de 1950, habiendo alcanzado algunas calidades escasas un nivel enteramente desproporcionado en relación con los otros precios del mercado. El retraso en la producción de la costa oeste vino acompañado de una demanda sostenida que no había sido prevista. Para fines de marzo, el precio medio de la madera de abeto Douglas era de 53 y 55 dólares el millar de pies cuadrados de taller, o sea, diez dólares más que el año anterior. El alza media de los precios de toda clase de madera aserrada para construir llegó a un 4.4 por ciento durante el primer trimestre del año. No se cree que los precios lleguen a nivelarse hasta en tanto no se disponga de mayores existencias durante el año de madera secada a la intemperie.

Como resultado de la gran actividad registrada en el mercado al terminar el año, no se sintió un efecto muy marcado por la competencia de los precios canadienses. Sin embargo, en opinión de la Asociación de Productores de Madera Aserrada de la Costa Oeste, los salarios más bajos, los costos de transportes más reducidos y el "margen de utilidad" creado por la devaluación de la moneda, proporcionan ventajas decididas a los aserraderos de la Columbia Británica que compiten con los aserraderos de los Estados de Wáshington y Oregón, las cuales pueden llegar hasta 11.60 dólares por millar de pies cuadrados de taller. La tarifa de importación vigente en los Estados Unidos es de un dólar por millar de pies cuadrados de taller.

Exportaciones

Las exportaciones de madera blanda aserrada, que decayeron durante el primer semestre de 1949 en comparación con el del año anterior, mostraron aumento durante el segundo semestre del año. El volumen de las exportaciones de madera blanda aserrada durante todo el año llegó a la cantidad de 257,000 standards, en comparación con 240,000 standards en 1948. Las exportaciones al Reino Unido bajaron un 37 por ciento del nivel alcanzado en 1948, llegando únicamente a 29,000 standards. Sin embargo, los embarques a los demás países considerados dentro del Programa de Recuperación Europea aumentaron ligeramente. Las exportaciones a regiones fuera del Hemisferio Occidental incluyeron cantidades considerables enviadas a la Unión Sudafricana, Australia y Korea.

Durante el primer trimestre de 1950, las exportaciones de madera blanda aserrada bajaron un 36 por ciento de la cantidad exportada en el mismo período en 1949, llegando únicamente a 38,000 standards.

Importaciones

Las importaciones de madera blanda aserrada aumentaron considerablemente durante el último trimestre del año en comparación con los tres trimestres anteriores, habiendo aumentado en un 19 por ciento las importaciones de abeto Douglas y pícea. Las importaciones correspondientes a todo el año de 1949 ascendieron a 728,000 standards, o sea un 13 por ciento menos de los 840,000 standards importados en 1948.

La fuerte demanda que prevaleció durante los primeros meses de 1950 se reflejó también en las importaciones. Por tal motivo, las importaciones de madera aserrada durante el primer trimestre del año llegaron a 273, 000 standards, cantidad excepcionalmente el evada y superior en un 35 por ciento a las importaciones verificadas durante el período correspondiente de 1948

AMÉRICA LATINA

En Brasil, la producción de madera aserrada de pino del Paraná ha estado limitada desde hace algún tiempo a un nivel que corresponde aproximadamente al 30 por ciento de la capacidad total de los aserraderos; así, en 1947-48, la producción autorizada para los 2,900 o más aserraderos, con una capacidad conjunta de 1,120,000 standards, fué tan sólo de 348,000 standards. Según cálculos teóricos, el consumo doméstico podría llegar a 330,000 standards por año; en 1947 y 1948 fué de unos 220,000 y 180,000 standards, respectivamente.

Durante el primer semestre de 1949, el Instituto Nacional del Pino limitó la producción de madera de pino del Paraná a un 40 por ciento de la capacidad de los aserraderos y mantuvo las restricciones que prohiben la instalación de nuevos aserraderos en las regiones de los pinoles. Alrededor de un 80 por ciento de la producción de madera aserrada de tercera y cuarta clase y un 20 por ciento de la de primera y segunda son absorbidos por lo general por el mercado nacional, destinándose el resto a la exportación.

Las exportaciones de madera blanda aserrada del Brasil llegaron en 1948 a 202,000 standards. Tradicionalmente, Argentina es el principal consumidor, adquiriendo el Uruguay cantidades bastante menores. Durante el primer semestre de 1949, según se informa, las exportaciones se redujeron a casi un 50 por ciento de las del período correspondiente de 1948, posiblemente como resultado del convenio comercial a base de trueque celebrado por Argentina con Yugoeslavia y Rumania, el cual entró en vigor en 1948. Sin embargo, en círculos de negocios se cree que los recientes convenios comerciales celebrados con la Argentina y el Uruguay lograrán mejorar la situación. Como ya se ha mencionado en otra parte de este informe, una cantidad importante de madera aserrada del Brasil ha sido contratada por el Reino Unido para entregas en 1950 sobre una base de trueque.

Se considera que la zona de pinoles del Brasil podría aumentar en varios tantos su actual producción para exportación sin ocasionar un agotamiento de los recursos forestales.

Sólo pequeñas cantidades de madera blanda aserrada se reciben en los países Centro y Sudamericanos procedentes de otros países fuera de Estados Unidos, Canadá y Brasil. La posición de los países importa dores de madera blanda aserrada se vió afectada en 1949 por las fuertes restricciones impuestas a las importaciones en dólares como resultado de la situación monetaria. Los embarques de madera blanda aserrada de Estados Unidos a la Argentina bajaron de 13,000 standards en 1948 a 400 en 1949. Las exportaciones de Estados Unidos a otros países latinoamericanos también disminuyeron, a excepción de embarques a México y embarques relativamente pequeños a Chile y Haití, los cuales registraron un leve aumento.

Las exportaciones de Suecia de madera blanda aserrada y cepillada a los países de Centro y Sudamérica aumentaron de 1,500 standards en 1948 a 2,300 en 1949.

AFRICA

Datos preliminares extraoficiales relativos a importaciones de madera blanca aserrada y cepillada efectuadas por la Unión Sudafricana, muestran una reducción de 128,000 standards en 1949 a 88,000 standards en 1949. Las importaciones procedentes de Estados Unidos bajaron ligeramente, llegando a un total de 29,000 standards en comparación con 34,000 en 1948. Los embarques procedentes de Canadá bajaron a 36,000 standards en comparación con 47,000 en 1948, y los de Suecia bajaron a 12,000 en contraste con 32,000 standards importados el año anterior. La Unión Sudafricana importó también 3,000 standards de madera blanda del Brasil en 1948.

Los embarques totales de madera aserrada tanto de la América del Norte como de los Países Escandinavos a otros mercados del Africa registraron un ligero aumento. Los embarques de Suecia e Egipto y el Sudán, por ejemplo, se aproximaron a 17,000 standards, en comparación con unos 15,000 en 1948.

EL LEJANO ORIENTE Y OCEANÍA

Japón, en otro tiempo el principal comprador individual de madera aserrada de los Estados Unidos, requiere importaciones considerables de madera aserrada además de los abastecimientos disponibles de su producción nacional. Sin embargo, no se vislumbran por ahora los medios para financiar importaciones en grande escala de madera aserrada.

En 1949, Hongkong importó un total de 50,000 standards de madera aserrada de abeto Douglas abeto chino y pino chino, habiendo reexportado 1,600 standards.

La demanda de madera en Australia se ha mantenido a un alto nivel durante los últimos años, como resultado de la suspensión de las actividades de construcción durante la guerra. El consumo aparente de madera blanda aserrada se ha elevado de 173,000 standards en 1947 a 180,000 en 1948 y 222,000 en 1949. Se cree que el consumo pueda llegar a aumentar ligeramente en 1950 y que alcance para 1951 un total de 242,000 standards.

No se puede prever hasta que grado la industria nacional aserradora de madera y muy especialmente los recursos forestales existentes en Australia podrán satisfacer las necesidades futuras de una población que aumenta rápidamente. La producción de madera blanda aserrada ha mostrado una tendencia a subir, constante si bien lenta. De 99,000 standards en 1947 y 101,000 en 1948, llego a 103,600 standards en 1949. La producción doméstica cubrió aproximadamente el 67 por ciento del consumo total en 1947 y cerca del 47 por ciento en 1949. Se cree que en 1950 la producción pueda subir ligeramente (a unos 104,100 standards) y otro tanto en 1951 (a unos 105,500 standards). El déficit cada día mayor entre las necesidades y la producción se ha podido cubrir por medio de importaciones, tradicionalmente de la América del Norte, Nueva Zelandia, Borneo Británico y los Países Escandinavos. A pesar de la preferencia arancelaria, las importaciones procedentes de Canadá bajaron en 1948 a una cantidad inferior a las que procedieron de Estados Unidos, debido a precios f.o.b. más favorables cotizados por Estados Unidos. Se informa haberse registrado una modificación en las tarifas australianas, mediante la cual se impone un impuesto de importación de 12.5 por ciento ad valorem sobre las importaciones de madera aserrada procedentes de Estados Unidos, dejando libre de impuestos las que procedan del Canadá. Indudablemente que esta circunstancia se hará sentir respecto a la fuente de importaciones. De conformidad con datos estadísticos de Estados Unidos, las exportaciones de madera blanda aserrada de los Estados Unidos a Australia siguieron aumentando en 1949, habiendo alcanzado un total de 25,000 standards. Los embarques procedentes de Suecia llegaron igualmente a 25,000 standards.

En Nueva Zelandia, el consumo de madera ha alcanzado un alto nivel, esperándose que aumente, especialmente si continúa la corriente de inmigración. Durante el año fiscal que terminó el 31 de marzo de 1949, el consumo aparente de toda clase de madera aserrada llegó a 239,000 standards, de los anales 234,000, o sea 98 por ciento, correspondieron a madera blanda aserrada. El Director Forestal de Nueva Zelandia estima que, a juzgar por el consumo actual, la demanda anual de madera aserrada alcanzará en el país unos 300,000 standards dentro de los próximos 15 años. Durante el período 1944-48, el número de aserraderos en servicio aumentó un 50 por ciento hasta llegar a un total de cerca de 700. Durante el año fiscal terminado el 31 de marzo de 1949, la producción de madera aserrada alcanzó un récord nunca igualado de 241,000 standards, de los anales 85,000 correspondieron a madera de especies coníferas exóticas. Las especies nativas - principalmente de hojosas, pero incluyendo también algunas especies de coníferas considerablemente explotadas - han proporcionado casi el 70 por ciento de toda la madera aserrada consumida en el país. Existe una fuerte corriente de opinión en el sentido de que los cortes anuales de estas especies deben reducirse drásticamente, y en consecuencia los aserraderos tendrán que suspender sus operaciones o bien obtener abastecimientos de maderas exóticas. Se cree que las especies exóticas podrían proporcionar para 1960 unos 328,000 standards de madera aserrada, de los cuales 250,000 standards serían absorbidos por el consumo nacional.

Las exportaciones de madera blanda aserrada de Nueva Zelandia empiezan a constituir un renglón importante del comercio en Oceanía. De escasos 4,700 standards en 1947, el volumen de las exportaciones de madera blanda subió en 1948 a 10,900 standards. En 1949, las exportaciones de maderas blandas de especies exóticas realizadas por Nueva Zelandia llegaron a 11,100 standards, y se espera que en 1950 se registrará un aumento sobre dicha cantidad. Se tiene proyectado aumentar durante el periodo 1951-54 las exportaciones hasta 35,000 standards, y para cuando la Unidad Nacional Integral entre en operación en 1954 o 1955, podrá haber disponibles para la exportación 70,000 standards como máximo. Para esa fecha, los embarques a otros mercados fuera de Australia, que en la actualidad adquiere la mayor parte de los excedentes de madera blanda aserrada de Nueva Zelandia, podrán llegar a cantidades de consideración.

Planchas de Fibra

DESDE la publicación en UNASYLVA 1 de un informe anterior respecto a planchas de fibra, se han registrado progresos notables en la manufactura de planchas de fibra tanto en el campo científico como en el de la aplicación práctica de los resultados de la investigación básica.

1 Volumen 11, No. 4 (julio-agosto 1948). Se considera necesario repetir aquí la siguiente nota al pie del informe anterior:

"Por Planchas de Fibra según se discuten en este informe, se entiende planchas o láminas, hojas, o rollos, usados principalmente en la construcción de edificios, en los que la principal materia prima es la madera. La materia prima puede ser en la forma de madera para pasta, pasta de madera, papel de desperdicio, desperdicios de aserradero, pedacería procedente de cedazos, etc. Se excluyen las planchas de yeso y argamaza.

"Por Planchas para Paredes se entiende las planchas de fibra (duras o semiduras) de 3 a 7 mm. de espesor, que se usan primordialmente para divisiones, paredes laterales, y otros trabajos de construcción.

"Planchas Aislantes se refiere a material aislante en hojas o rollos generalmente de 8 a 20 mm. de espesor, de estructura porosa y buenas propiedades aislantes térmicas y acústicas. Las fibras quedan de tal manera colocadas que contienen una gran cantidad de aire atrapado o "inerte".

"Los datos estadísticos de algunos países no hacen distinción entre planchas de fibra en las que la materia prima principal es madera y planchas de fibra en las que la materia prima principal puede ser bagazo, paja, yeso, etc. por lo que no todas las cantidades son directamente comparables".

Las investigaciones anatómicas, en las que se emplean los nuevos sistemas de coloración diferencial de las diversas laminillas de las paredes de las celdillas con tinturas metacromáticas, han permitido un conocimiento más claro acerca de la influencia que ejerce la morfología de las fibras y su tratamiento durante el proceso de desfibración sobre las propiedades finales de las masas afelpadas y las planchas secadas y prensadas. Revelan que estas propiedades no están regidas únicamente por la longitud de la fibra - lo cual había sido considerado por largo tiempo como el factor decisivo - sino principalmente por la flexibilidad de las fibras, la cual depende principalmente de la relación entre espesor de la pared de la celdilla y diámetro del lumen. Esta nueva concepción ha estimulado el aprovechamiento de las maderas duras.

Otro tanto ha hecho el mayor conocimiento obtenido acerca del papel que desempeñan como agentes adherentes los diferentes componentes químicos de la pared de la celdilla. Aún cuando no está todavía del todo claro hasta qué grado emerge esta acción adherente de la repolimerización de la lignina (depolimerizada primero mediante una ligera cocción que reduce su punto de fusión) y qué tanto de la presencia de los polisacáridos (principalmente hemicelulosas, ácidos urónicos y algunas substancias extractivas), se han realizado progresos importantes en la utilización técnica de estas acciones autoadherentes.

Las propiedades de los adherentes químicos especialmente resinas sintéticas a base de condensados de rea, fenol, o melamin - formaldehida, y productos bituminosos derivados del petróleo - han sido también mejorados por medio de nuevos métodos de condensación y se han desarrollado nuevos métodos para difundir estos adherentes en forma más fina a través de las fibras de madera, partículas o granos que constituyen la parte principal de las planchas.

La técnica mencionada en último lugar ha traído como consecuencia un importante desarrollo del llamado proceso de "prensado en seco", que resuelve algunas de las desventajas serias del antiguo proceso de formación de fieltro con pastas muy diluidas. El proceso de prensado en seco reduce considerablemente tanto la inversión inicial requerida como los costos de operación, principalmente por la economía en el tiempo de prensado y en la cantidad de energía calórica requerida para la evaporación del agua contenida y además por el hecho de que no hay necesidad de emplear redes de alambre. Por otra parte, las planchas producidas conforme a este proceso tienen sus dos caras lisas, habiéndose aumentado en consecuencia su campo de aprovechamiento, lo que ha elevado considerablemente su valor comercial.

Dado que se han efectuado progresos significativos en lo relativo a transporte y manejo, ahora es posible producirlas económicamente en fábricas chicas. Los antiguos procesos húmedos exigían unidades de producción relativamente grandes, a fin de lograr resultados económicos.

Un mayor aprovechamiento de los desperdicios del bosque lo ha hecho posible el empleo de máquinas transportables capaces de funcionar en los bosques mismos. Algunas de estas máquinas "pican" las ramas y copas de los árboles y las cargan neumáticamente en camiones; otras desfibran burdamente los lotes chicos de material verde mediante la acción de cilindros de rápida rotación dotados de afiladas y fuertes agujas flexibles. Han sido desarrollados métodos similares para el aprovechamiento de desperdicios industriales, que se prestan de manera especial para la fabricación de centras de refuerzos de paneles prefabricados (blockboards), muebles y otras piezas relativamente gruesas.

Ha sido desarrollada una gran diversidad de planchas elaboradas con fibras y partículas de madera En un extremo se encuentran las planchas extralivianas, con propiedades excelentes de aislamiento térmico, producidas en la actualidad por ingeniosos procesos de formación de espumas. Estos procedimientos se valen de aire dividido en partículas extremadamente finas o de la coagulación de la lignina mediante la acción de dióxido de carbono proveniente de gases de chimenea que se hacen pasar por el líquido en estado de dispersión muy fina. El extremo opuesto de la escala lo ocupan las planchas extraduras, empleadas entre otros usos para matrices, en el proceso de prensado de láminas metálicas.

El Comité de la FAO sobre Tecnología Mecánica de la Madera inició investigaciones sobre los productos que acabamos de mencionar al celebrar su tercera reunión en conexión con la Primera Conferencia sobre Tecnología Mecánica de la Madera, efectuada en Ginebra en septiembre de 1949. Los métodos para ensayo de las planchas de fibra que allí sugirió el Delegado de los Estados Unidos de América, métodos que ya habían sido aceptados casi sin modificación por diversas sociedades nacionales de investigación maderera - fueron aceptados unánimemente como base de las discusiones y de un mayor desarrollo. A fin de acelerar las investigaciones, se designó una comisión especial de trabajo, integrándose con los delegados de los países en los cuales se realiza la mayor parte de estos ensayos, es decir, Canadá, el Reino Unido, Francia, Suecia y los Estados Unidos de América. Esta unificación tendrá un efecto muy importante en el fomento de la aplicación de estos productos.

La capacidad teórica actual de la industria mundial elaboradora de planchas de fibra puede estimarse en unos 2,500,000 toneladas por año. De usarse en su totalidad, la producción anual de planchas de fibra por habitante resultaría de carea de 1.0 kg. como promedio; sin embargo, por diferentes razones en diferentes países, las operaciones no se encuentran a toda capacidad. Pero aún bajo estas condiciones, ha habido indicaciones de una saturación parcial de los mercados. Este fenómeno puede atribuirse a un retardo temporal en la demanda de planchas aislantes en varias partes del mundo y a una tardanza relativa en la apertura de nuevos mercados. En cambio, la demanda de maderas duras ha mostrado una tendencia a fortalecerse. Esto ha estimulado no solamente el aumento considerable de la producción de estos tipos de planchas, sino la preponderancia de la producción de planchas duras en la plantación de nuevas fábricas. La relación que existe actualmente en la capacidad de producción de planchas duras y planchas blandas es aproximadamente de 9 a 10, respectivamente. Una vez que se realicen las ampliaciones a las fábricas de que hasta hoy se ha informado, es probable que la capacidad mundial de producción de planchas duras y planchas blandas sea más o menos igual en el curso de los próximos dos o tres años. Para entonces, si se usa toda la capacidad mundial de producción disponible, se podrá contar anualmente con cerca de 3,200,000 toneladas de planchas de fibra. Tomando en consideración el aumento normal de la población mundial, esta cantidad permitiría un consumo anual de 1.3 kg. aproximadamente de fibra, por habitante.

Durante los últimos tres años, el consumo de planchas de fibra por habitante parece haber decaído en determinados países que anteriormente habían consumido cantidades relativamente importantes de este material para trabajos de construcción y otros fines. Por otra parte, vastas regiones, donde la población es relativamente densa, siguen ano consumiendo cantidades muy pequeñas de planchas de fibra. Los hechos anteriores sugieren que, en términos generales, el futuro de la industria elaboradora de planchas de fibra depende en gran parte del grado a que puedan abrirse los mercados de este producto en regiones de escaso o nulo consumo.

CONSUMO

El consumo de planchas de fibra por habitante varía considerablemente de un país a otro. En algunas regiones del mundo, el producto ocupa un lugar firme como material de construcción, manteniéndose un consumo por habitante relativamente alto. Pero quedan aún vastas zonas especialmente en los trópicos y subtrópicos, donde existe prejuicio contra el uso de las planchas de fibra. Sin embargo, la experiencia ha demostrado que una vez que se logra introducir con éxito el uso de planchas de fibra (algunas veces tratadas por procedimientos especiales), la demanda llega a crecer rápidamente. Por otra parte, cada día ganan más terreno los nuevos usos de las planchas de fibra, como por ejemplo en la substitución de planchas duras por madera multilaminar, fenómeno que ha afectado en años recientes tanto la producción como el comercio de las planchas de fibra.

Sobre la base de la información de que se dispone, se pueden ofrecer los siguientes datos respecto a países seleccionados, que sirven para ilustrar el consumo actual de planchas de fibra por habitante:

País

Consumo per habitante


(kilogramos)

Suecia

19.0

Noruega

12.0

Estados Unidos de América

5.0

Finlandia

4.0

Australia (1948)

3.0

Reino Unido

1.5

Unión Sudafricana (1948)

1.0

Argentina (1948)

0.6

Japón

0.2

India (1948-49)

0.03

El consumo anual por habitante varía de año en año, no únicamente en aquellas regiones que, faltas de producción propia, tienen que depender total o principalmente de las importaciones, estando sujetas por lo tanto a los factores que afectan al comercio en general, sino también en los países considerados como los principales productores, que cuentan con mercados internos más o menos estables. Por ejemplo, el consumo interno de Suecia, estimado en 1946 en 24 kg. por habitante, en 1949 registra una baja muy marcada; en forma semejante, el consumo de los Estados Unidos de América, que en 1946 fué de unos 8 kg. como promedio, en 1949 fué considerablemente más bajo.

EUROPA

Capacidad y Producción

La capacidad total anual de las fábricas europeas actualmente en operación puede estimarse en unas 850,000 toneladas. Cerca de un 60 por ciento de esta capacidad total de producción se halla en los tres países del norte, Finlandia, Suecia y Noruega, quedando el resto distribuido en un gran número de países esparcidos por el continente.

Durante todo el período de la postguerra, la producción de planchas de fibra se ha visto reducida en muchos de los países productores importantes, debido F. estancamientos temporales ocasionados por la modernización y ampliación de las fábricas, escasez de electricidad o de combustible, u otras circunstancias que afectan la producción. Por lo tanto, la diferencia entre la capacidad teórica y la producción real ha sido considerable en numerosos casos. La producción total de planchas de fibra en Europa, que aumentó considerablemente de 1948 a 1949, sigue siendo inferior a la capacidad de producción de las fábricas.

Suecia, el principal país europeo productor de planchas de fibra, cuenta en la actualidad con quince fábricas en operación, con una capacidad anual que en conjunto llega a 300,000 toneladas. A pesar de cierto recelo en la producción de planchas aislantes debido a la dificultades para la venta de este tipo, la producción total de planchas de fibra aumentó de 196,000 toneladas en 1948 a 233,000 en 1949, o sea un aumento de un 19 por ciento. La producción de planchas duras, que actualmente representa cerca del 80 por ciento de la producción total, alcanzó un nuevo record en 1949 (185,000 toneladas en comparación con 172,000 en 1948).

Para fines de 1949, la industria elaboradora de planchas de fibra de Finlandia, contando con seis fábricas en operación, había alcanzado ya la capacidad teórica de unas 120,000 toneladas por año. Como durante el año se instaló nueva maquinaria o se hizo trabajar la existente a baja velocidad en varias fábricas, la producción total no pasó de 54,900 toneladas, en comparación con 42,000 toneladas el año anterior La producción de planchas duras fué casi el doble en 1949 de la correspondiente a 1948 (16,500 toneladas en comparación con 8,600 en 1948).

En Noruega únicamente tres fábricas de planchas de fibra trabajaron durante 1949. Aún cuando su capacidad total de producción, una vez realizadas las mejoras y adiciones emprendidas durante el año, llega a casi cerca de 70,000 toneladas anuales, la producción efectiva en 1949 sólo fué de 47,500 toneladas (39,000 toneladas en 1948), de las cuales 20,900 correspondieron a planchas duras (17,400 toneladas en 1948).

Hacia las postrimerías de la guerra, las diecisiete fábricas de planchas de fibra existentes en Alemania habían alcanzado una producción anual de unas 75,000 toneladas de planchas duras y más de 14,000 toneladas de planchas aislantes. La nueva demarcación de fronteras y el desmantelamiento de industrias que siguió a la guerra motivaron que sólo quedaran en territorio alemán nueve plantas, con capacidad teórica de 53,000 toneladas de planchas duras y 6,000 de planchas blandas, en conjunto. De estas cantidades totales, en la zona soviética quedaron fábricas capaces de producir 12,000 toneladas de planchas duras y el resto quedó en las zonas occidentales. Para 1949 el número de fábricas en las zonas occidentales llegaba a nueve, con una capacidad conjunta estimada en unas 75,000 a 80,000 toneladas anuales, de las que unas 55,000 corresponden a planchas duras La producción efectiva, tan sólo en la zona de ocupación británica - estadounidense, aumentó de 36,800 toneladas en 1948 a 56,800 toneladas en 1949, cantidad muy superior al máximo alcanzado durante la guerra. La mayor parte de la producción de esta zona consiste en planchas duras. La producción de la zona francesa ha aumentado también en forma apreciable.

Austria cuenta con cuatro fábricas de planchas de fibra, con una capacidad conjunta estimada en cerca de 30,000 toneladas por año. Sin embargo, la producción real está muy atrás de esta cantidad teórica. En 1949 ascendió a 17,600 toneladas en total (13,200 en 1948), de las cuales 8,600 toneladas fueron planchas duras.

El Reino Unido y Francia cuentan en la actualidad con tres fabricas cada uno, siendo la capacidad anual de producción de cada país de unas 40,000 toneladas. La producción de planchas de fibra del Reino Unido subió de 34,200 toneladas en 1948 a 39,000 en 1949. La proporción de las planchas aislantes ha sido de un 60 por ciento del total, aproximadamente La producción de Francia durante 1948 fué de 18,300 toneladas, de las cuales 10,300 toneladas correspondieron a planchas duráis. La producción durante los tres primeros trimestres de 1949 (13,900 toneladas) indica que la producción de todo el año puede haber sido igual, por lo menos, a la del año anterior.

En Italia existen cuatro fábricas de importancia, las que tienen una capacidad total de unas 29,000 toneladas por año. Tomando en cuenta varias plantas chicas, la capacidad de producción del país llega en conjunto a unas 32,000 toneladas por año, de las cuales 29,000 corresponden a planchas duras la producción total de 1949 fué de 26,900 toneladas en comparación con 25,300 en 1948. La mayor parte de esta producción - casi el 92 por ciento en 1949 y el 98 por ciento en 1948 - correspondió a planchas duras.

Bélgica y Suiza forman parte también del grupo de medianos productores europeos. Se informa que Bélgica, con sus dos fábricas en operación, posee una capacidad anual de producción de 25,000 toneladas y Suiza, con tres fábricas, tiene una capacidad total de 20,000 toneladas por año. La producción ha decaído ligeramente en Bélgica, de 15,800 toneladas en 1948 a 15,100 en 1949. La producción suizo se estimó en 12,000 toneladas en 1949, en contraste con 8,500 en 1948.

Hacia fines de 1948, los Países Bajos, que ya producían algunas cantidades de planchas aislantes, iniciaron las operaciones de una nueva fábrica en Hoogezand. Aprovechando paja como materia prima, la nueva planta está equipada con maquinaria del tipo desfibrados, y tiene una capacidad de 10,000 toneladas de planchas duras o semiduras y unas 8,000 toneladas de planchas aislantes. La producción total del país subió de 2,600 toneladas de planchas aislantes en 1948 a 5,100 toneladas de planchas duras y 1,800 toneladas de planchas aislantes en 1949.

Otros países de la Europa Occidental productores de planchas de fibra son Dinamarca e Irlanda, siendo este último país uno de reciente ingreso, relativamente. Dinamarca tiene una capacidad de producción de unas 8,000 toneladas por año. Su producción efectiva en 1949 decayó, de la cantidad de 7,500 toneladas de planchas aislantes alcanzada en 1948 a 6,300 en 1949, a única fábrica de planchas de fibra con que cuenta Irlanda inició sus operaciones en 1949. Se informa que posee una capacidad anual de 8,000 a 10,000 toneladas de planchas duras utilizando la paja como materia prima.

Entre los países de Europa Occidental (excluyendo la zona soviética de Alemania), se sabe que Yugoeslavia y Checoeslovaquia cuentan cada uno con una fábrica de planchas de fibra en operación. Se informa que la fábrica de Yugoeslavia tiene actualmente una capacidad anual de 4,000 toneladas de planchas duras, pero que una vez terminadas las amplia" clones que se realizan su capacidad aumentará en 7,000 toneladas de planchas duras. Se informa que la fábrica de Checoeslovaquia ha duplicado su capacidad inicial, siendo ahora capaz de producir 12,000 toneladas de planchas duras.

Perspectivas

Se informa que en Suecia se cree que los mercados internos de planchas de fibra se consolidarán todavía más en 1950. Aún cuando las exportaciones de planchas aislantes puedan permanecer relativamente bajas, se confía en que la continua demanda de planchas duras estimule el aumento de la producción. De acuerdo con esta tendencia, la capacidad de producción del país habrá de aumentarse.

De la información disponible se desprende que actualmente se está instalando una nueva fábrica para la elaboración de planchas duras, con capacidad anual de 23,000 toneladas, y que se tiene en proyecto instalar en un futuro muy próximo otras dos fábricas de planchas duras. De éstas, una con capacidad anual de 10,000 a 12,000 toneladas deberá empezar a trabajar durante el segundo semestre de 1951, y la otra, con capacidad de unas 12,000 toneladas anuales, para la primavera de 1952. Para esa fecha, la capacidad total de la industria sueca elaboradora de planchas de fibra deberá alcanzar a casi 350,000 toneladas, repartidas entre planchas duras y planchas aislantes en una proporción de 2 a 1.

Como país exportador, Finlandia está más o menos en las mismas condiciones que Suecia, pero se cree que las posibilidades de aumentar el consumo interno de planchas de fibra son tal vez mejores allí que en Suecia, donde el consumo del mercado nacional ya es relativamente alto. La capacidad de las fábricas existentes en Finlandia ha sido aumentada recientemente con la adición de nueva maquinaria. A principios de 1950 se inició una nueva fábrica que emplea como materia prima desperdicios de aserradero y como combustible desperdicios de una fábrica de madera multilaminar Esta fábrica produce planchas duras, exclusivamente, y tiene una capacidad de 10,000 a 12,000 toneladas por año. Se estima que la capacidad de producción del país alcanzará durante el presente año la cantidad teórica de 135,000 toneladas, de las cuales 85,000 corresponderán a planchas aislantes.

En Noruega se tiene proyectado que empiece a trabajar para el segundo semestre de 1950 una nueva fábrica con capacidad de 6,000 a 10,000 toneladas de planchas aislantes. Esta fábrica puede ser ampliada con facilidad para producir otros tipos de planchas de fibra. Durante 1950 también empezará a trabajar otra fábrica, con producción de unas 10,000 toneladas de planchas duras y semiduras. En esta forma, para fines del año el país contará con cinco fábricas con una capacidad conjunta de cerca de 90,000 toneladas por año.

En la Europa Occidental, donde todos los países productores de planchas de fibra también las importan, solamente Francia y España están instalando nuevas fábricas. La nueva fábrica francesa, proyectada para terminarse en 1951, tendrá una capacidad anual de 8,000 toneladas de planchas duras. La primera fábrica española de planchas de fibras con una capacidad de 10,000 toneladas de planchas duras, deberá iniciar sus operaciones durante el primer semestre de 1951. Se informa que dos de las fábricas de planchas de fibra existente en el Reino Unido proyectan la instalación de nueva maquinaria para la producción anual de 10,000 toneladas de planchas duras en cada una. Además, se informa que dos de las grandes fábricas de planchas duras de Italia se proponen aumentar al doble su producción en el curso de los dos próximos anos.

En la Europa Central, se proyecta aumentar en un futuro próximo la capacidad de producción de la Alemania Occidental y de Austria. En la Alemania Occidental actualmente se está instalando una nueva fábrica, con capacidad anual de 9,000 toneladas de planchas duras y 4,000 toneladas de planchas aislantes, esperándose terminarla para 1951 o 1952. En Austria se tiene en proyecto instalar tres nuevas plantas para la elaboración de planchas duras.

Según los planes de que se informa, durante los próximos años deberá aumentar considerablemente la capacidad de producción de los países de la Europa Oriental. Yugoeslavia proyecta terminar para 1951 la instalación de una fábrica cuya capacidad se estima en 12,000 toneladas de planchas duras y 6,000 de planchas aislantes. En Checoeslovaquia se pensaba que para mediados de 1950 estaría trabajando una nueva fábrica con capacidad anual de 10,000 toneladas de planchas duras y 8,000 de planchas aislantes, y otra, con capacidad similar, para principios de 1951. Además el plan de desarrollo económico de Polonia prevé la construcción de tres fábricas, cada una con capacidad de 10,000 toneladas de planchas duras y 8,000 de planchas aislantes que deberán quedar listas entre 1951 y 1953. El actual plan quinquenal de Hungría proyecta igualmente la instalación de una fábrica de planchas de fibra con capacidad anual de 10,000 toneladas. Se desconoce la producción actual y los planes que se tengan para el futuro en Rumania.

Con base en los datos anteriores, ano cuando se consideren únicamente como datos aproximados, se puede estimar que la capacidad de producción de Europa habrá de aumentar durante los dos o tres años siguientes en unas 250,000 a 300,000 toneladas adicionales. La instalación de nueva maquinaria y la erección de nuevas fábricas llevan por mira, primordialmente, el aumento de la producción de planchas duras.

AMÉRICA DEL NORTE

Capacidad y Producción

Los Estados Unidos de América, con gran ventaja el mayor productor de planchas de fibra entre todos los países de la tierra, cuenta en la actualidad con más de veinte fábricas de planchas de fibra en actividad. Su capacidad anual de producción puede estimarse en conjunto en cerca de 1,200,000 toneladas, de las que una tercera parte corresponde, en términos generales, a planchas duras y las dos terceras partes restantes a planchas aislantes

La producción efectiva de planchas de fibra aumentó rápidamente durante los primeros años de la postguerra, de 868,000 toneladas en 1946 a 973,000 en 1947 y 1,152,000 toneladas en 1948. Sin embargo, en 1949 se registró una baja considerable a 801,000 toneladas. Este descenso se atribuyó a huelgas, una de las cuales mantuvo inactiva durante varios meses la fábrica de uno de los más grandes productores, y otra huelga, en una industria conexa, obligó a otro productor a suspender sus actividades durante un período de tiempo semejante. Sin embargo, hacia fines del año, la producción mejoró y durante el primer trimestre de 1950 llegó casi a 250,000 toneladas. Si este ritmo se mantiene con uniformidad durante el resto del año, la producción de 1950 podrá llegar a ser por lo menos igual a la de 1947.

De Canadá se informa que existen cinco grandes fábricas de planchas de fibra en actividad. La más nueva de éstas, situada en New Westminster, Columbia Británica, elabora planchas duras comprimidas, empleando como materia prima los desperdicios da una fábrica de madera multilaminar. La capacidad actual de producción del Canadá se estima en unas 200,000 toneladas por año. La producción, que de 118,000 toneladas en 1946 subió a 145,000 en 194., llegó a 149,000 toneladas en 1948, para alcanzar en 1949 un récord de 171,000 toneladas.

Perspectivas

Se informa que en los Estados Unidos de América una de las grandes compañías está ampliando su fábrica con la adición de nueva maquinaria con capacidad anual estimada en 100,000 toneladas de planchas aislantes. Otra compañía espera poder inaugurar en 1950 una nueva fábrica que habrá de producir 80,000 toneladas de planchas duras. Tomando en cuenta algunas nuevas adiciones y la instalación de nuevas plantas en el Canadá también, se estima que la capacidad de producción de la América del Norte podrá aumentar en el curso de los dos años siguientes en unas 200,000 toneladas, por lo menos

OTRAS REGIONES

Unión Soviética

Se informa que la Unión Soviética, que producía algunas cantidades de planchas de fibra en los años anteriores a la guerra, cuenta en la actualidad por lo menos con una fábrica de planchas de fibra con capacidad anual estimada en 10,000 toneladas de planchas duras y 8,000 de planchas aislantes. Sin embargo, no se sabe a punto fijo si esta fábrica se encuentra trabajando. Existen planes importantes para aumentar en años venideros la capacidad de producción de planchas de fibra. Según informes que se tienen, durante el período 1951-54 deberán construirse siete nuevas fábricas, cuya capacidad anual será en conjunto de 70,000 toneladas de planchas duras y 56,000 de planchas aislantes.

Africa

En la Unión Sudafricana una fábrica del tipo "Masonite" debió empezar a trabajar hacia fines de 1948 o principios de 1949. Según los informes proporcionados su capacidad es de 20,000 toneladas anuales, siendo en su mayor parte planchas duras.

Durante la guerra, estuvieron trabajando en el Africa Oriental Británica en forma esporádica, dos fábricas chicas, pero desde entonces no se ha vuelto a tener informes acerca de sus actividades.

Han sido pospuestos ahora los planes para instalar fábricas de planchas de fibra en los Territorios Tropicales Franceses, a excepción probablemente de Gabón, donde se piensa instalar una fábrica con capacidad de 10,000 toneladas. Se estima que para 1952 los Territorios Franceses de Ultramar producirán unas 20,000 toneladas de planchas de fibra.

Asia

En Asia, únicamente el Japón produce en la actualidad planchas de fibra. Su producción fué de 9,000 toneladas en 1947 y en 1948 alcanzo un volumen de 18,000 toneladas.

Sin embargo, la India ha venido realizando experimentos sobre la posibilidad de elaborar planchas para construcción utilizando el bambú como la principal fuente de materia prima, siendo bastante prometedores los resultados de laboratorio. Si estos experimentos demuestran ser económicamente costeables, el desarrollo de una industria basada en estos procesos pudiera tener importancia para toda la región del Sur y del Este de Asia donde crece el bambú.

Las proposiciones formuladas para la rehabilitación de Indonesia incluyen el establecimiento de una industria elaboradora de planchas de fibra para 1952-53 Sin embargo, se informa que la realización de tales planes está supeditada en gran parte a la posibilidad de contar con inversiones de capital extranjero.

Oceanía

En la actualidad, Australia cuenta con dos fábricas de planchas de fibras; una usa caña como materia prima, y la otra se basa en el proceso "Masonite" La producción de planchas blandas elaboradas con caña de azúcar depende de la producción de la industria del azúcar, habiéndose mantenido relativamente constante en 9.000 toneladas anuales. Este volumen de producción no es suficiente para satisfacer la demanda, pero se considera que un aumento de los abastecimientos deberá lograrse aumentando la producción de planchas blandas elaboradas con otros materiales. Para la producción australiana de planchas duras se está empleando como materia prima madera de baja calidad proveniente de bosques mixtos de especies duras. La producción fué de 10,600 toneladas en 1947 y se confiaba en poder alcanzar un nivel de 17,000 a 18,000 toneladas para 1950. Se informa que en Tasmania está siendo instalada actualmente una nueva fábrica con capacidad de 10,000 toneladas de planchas duras y se proyecta que inicie sus trabajos en 1950 o 1951.

América Latina

En Brasil, una fábrica ha venido produciendo plan chas aislantes utilizando los troncos de la planta del plátano o banano, si bien en forma esporádica. Se informa que debido a escasez de materia prima suspendió sus operaciones a mediados de 1949. Se informa que en el Estado de Sao Paulo se está instalando una nueva fábrica de mayor capacidad para elaborar planchas blandas.

En Argentina acaba de terminarse la instalación de la primera fábrica de planchas de fibra. Está equipada con maquinaria sueca, y su capacidad de producción anual es de 10,000 toneladas de planchas duras elaboradas de pujas de trigo y de lino. Se informa que la producción será mayor que la demanda interna

Se estima que la única fábrica de planchas de fibra existente en el Perú tiene una capacidad anual no mayor de 1,000 toneladas. Se informa que se han abandonado por ahora los planes que se tenían para instalar en Chile una fábrica de planchas.

El último país en ingresar al grupo de países productores ha sido México. Su primera fábrica, del tipo desfibrados, deberá quedar lista para fines de 1950. Su capacidad anual de producción será de 10,000 toneladas de planchas duras.

COMERCIO INTERNACIONAL

Tradicionalmente, el comercio de exportación de planchas de fibras lo han dominado la América del Norte y los países del norte de Europa. A partir de 1947, las cantidades correspondientes a la exportación del Canadá y los Estados Unidos de América han venido decayendo constantemente, en tanto que Suecia, el principal país exportador de planchas de fibras, y Finlandia han logrado aumentar sus exportaciones. Austria ha dado también muestras de actividad últimamente en el mercado de exportación.

Durante los últimas tres años, los embarques procedentes de los principales países exportadores han sido los siguientes:

País

1947

1948

1949


(millares de toneladas)

Austria

3

3

6

Finlandia

...

29

32

Noruega

5

10

9

Suecia

76

95

98

Canadá

47

41

32

Estados Unidos de América

37

33

21

Para Estados Unidos, el mayor productor de planchas de fibra, las exportaciones tienen muy poca importancia, habiendo representado en 1948 menos del 3 por ciento de la producción. En cambio, el Canadá exportó casi el 19 por ciento de su producción en 1949; Noruega casi el 20 por ciento; Austria más del 32 por ciento; Suecia cerca del 42 por ciento; y Finlandia casi el 58 por ciento.

Algunos otros países - por ejemplo Bélgica - exportan de tiempo en tiempo cantidades considerables de planchas de fibra, y cabe mencionar aquí que Nueva Zelandia ha ingresado últimamente al grupo de países exportadores. Además, existen indicaciones de que Italia podrá dar muestras de actividad en los mercados exteriores de planchas duras.

Durante los dos últimos años se han manifestado dos importantes tendencias en el comercio de las plan chas de fibra. Una de éstas es la demanda un tanto débil de planchas blandas y la demanda relativamente fuerte de planchas duras; la otra la constituye el cierre de mercados para planchas de fibras importadas en algunos países y la apertura de nuevos mercados en algunos otros. Ambas tendencias son reveladoras de que se está efectuando un movimiento definido y seria prematuro en los actuales momentos hablar de un patrón estabilizado del comercio de las planchas de fibra.

El Reino Unido ha sido el principal país importador de planchas de fibra, viniendo a continuación los Estados Unidos de América, los Países Bajos y Bélgica. Las importaciones de los principales países han sido las siguientes durante los tres últimos años:

País:

1947

1948

1949


(millares de toneladas)

Bélgica

10

8

11

Dinamarca

9

7

16

Francia

5

3

...

Países Bajos

13

29

25

Suiza

4

3

1

Reino Unido

34

49

37

Canadá

19

14

...

Estados Unidos de América

30

27

20

Brasil

3

2

...

India

16

29

...

1 Años de 1947-48
2 Años de 1948-49

En determinados países - especialmente Francia y Suiza así como también la Unión Sudafricana y Nueva Zelandia - las importaciones de planchas de fibra han disminuido como resultado del aumento de su propia producción. Sin embargo, en otras partes del mundo se han abierto nuevos mercados. Por ejemplo, se informa que en 1949 Suecia y Finlandia embarcaron cerca de 12,000 toneladas de planchas de fibra a Australia y más de 10,000 toneladas a Argentina. Se observa también algún aumento en las importaciones de planchas de fibra en Israel, Africa Oriental Británica, Malaca Británica y las Colonias de los Estrechos, Hong Kong, y Brasil.

Durante los primeros meses de 1950, las importaciones del Reino Unido indicaron una mayor demanda, sin duda como resultado de la suavización de las medidas de control.


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