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La FAO y la asistencia técnica

Por la Secretaría de la FAO

El programa ampliado de asistencia técnica de la FAO para las regiones insuficientemente desarrolladas del mundo fué iniciado en septiembre de 1950, con la firma de los acuerdos de asistencia técnica entre la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación y los gobiernos de Birmania, Guatemala y Arabia Saudita.

Para la ejecución de este programa se ha establecido un Fondo Especial de Asistencia Técnica, al cual han contribuido los estados miembros de las Naciones Unidas y de los organismos especializados. A la FAO e le ha asignado la mayor proporción de las sumas aportadas a este Fondo, es decir, el 29 por ciento, por lo cual tiene la gran responsabilidad de emplear estos dineros con el mayor provecho. Es necesario anotar que las contribuciones de los gobiernos participantes se efectúan en las respectivas monedas nacionales y están sujetas a las restricciones normales de cambio en el momento de utilizarlas en el pago de personal o de servicios proporcionados por las Naciones Unidas a los países beneficiarios.

La historia del programa ampliado de asistencia técnica fué referida en un artículo del Secretario Ejecutivo de la Junta de Asistencia Técnica de las Naciones Unidas. Durante el año último el Director General, asesorado por los jefes de las diversas direcciones técnicas de la FAO, se ha ocupado personalmente de los preparativos para la participación activa y plena de la FAO en este programa. Los asuntos de carácter administrativo y técnico han sido revisados y coordinados por un grupo interdepartamental de trabajo, cana uno de cuyos miembros tiene a su cargo las actividades generales de asistencia técnica que corresponden a su dirección.

El Dr. F. T. Wahlen, Jefe del Programa Ampliado de Asistencia Técnica de la FAO, tiene a su cargo la responsabilidad de asegurar la ejecución de las recomendaciones formuladas por la Conferencia y por el Consejo de la FAO con respecto al nuevo programa de inspeccionar y coordinar las actividades técnicas y específicas emprendidas por la FAO dentro de este programa; y de asesorar al Director General en todos los asuntos de la política que debe seguirse. El Dr. Wahlen tiene también la responsabilidad de coordinar las providencias concernientes a los problemas de orden financiero y administrativo que surjan en la ejecución del nuevo programa, así como de coordinar las instrucciones impartidas al personal de campo, e inspeccionar las actividades de las misiones correspondientes

Para orientar a los diversos organismos en la ejecución del Programa Ampliado de Asistencia Técnica para los países insuficientemente desarrollados, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha sentado los siguientes principios:

1. Considerar como objetivo primordial el ayudar a dichos países a fortalecer sus economías nacionales por medio del desarrollo de sus industrias y de su agricultura, con objeto de favorecer su independencia económica y política de acuerdo con el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas, y de asegurar a toda su población el logro de niveles más elevados de bien estar económico y social;

2. Observar los siguientes principios generales sentados en la resolución 200 (III) de la Asamblea General:

(a) La asistencia técnica para el des arrollo económico de los países insuficientemente desarrollados no será proporcionada por las organizaciones participantes sino de acuerdo con los Gobiernos interesados y según las solicitudes recibidas de ellos:

(b) Las clases de servicios que hayan de prestarse a cada país serán decididas por el Gobierno interesado;

(c) Los países que deseen recibir asistencia deberán realizar de antemano la mayor parte posible del trabajo a fin de definir la naturaleza y el alcance del problema planteado

(d) La asistencia técnica suministrada; (i) No constituirá un pretexto de ingerencia económica o política por parte del extranjero en los asuntos internos del país interesado y no irá acompañada de ninguna consideración de carácter político; (ii) No será dada más que a los gobiernos o por su conducto; (iii) Deberá responder a las necesidades del país interesado y (iv) Será proporcionada, hasta donde sea posible, en la forma deseada por el país interesado

3. Evitar toda distinción basada en la estructura política del país que solicite asistencia, o en la raza o religión de su población.

Al mismo tiempo, los Gobiernos que solicitan asistencia deberán aceptar ciertas obligaciones. Por tanto, es conveniente citar textualmente parte del anexo de la resolución pertinente del Consejo Económico Social.;

Los Gobiernos solicitantes deberían estar dispuestos a convenir en:

1. Facilitar las actividades solicitadas de las organizaciones participantes ayudando a éstas a conseguir la información necesaria acerca de los problemas para los cuales se ha solicitado su asistencia, información que deberá limitarse estrictamente a cuestionas directamente relacionadas con las solicitudes concretas de asistencia técnica; y cuando sea oportuno, a facilitar sus con tactos no sólo con los organismos oficiales sino también con personas y grupos interesados en los mismos problemas o en problemas conexos

2. Dar plena y rápida consideración a los consejos de orden técnico que reciban como resultado de su cooperación con las organizaciones participantes en respuesta a las solicitudes presentadas por ellos

3. Comprometerse a mantener o a establecer lo antes posible aquellos organismos de coordinación gubernamental que sean necesarios para conseguir la movilización, canalización y utilización de sus propios recursos técnicos, naturales y financieros, en interés del desarrollo económico destinado a mejorar el nivel de vida de sus pueblos, y por medio de los cuales se pueda conseguir la utilización efectiva de cualesquier recursos importantes de origen internacional para la asistencia técnica;

4. Asumir normalmente la responsabilidad de sufragar una parte substancial del costo de los servicios técnicos que se les suministren, por lo menos aquella parte que pueda ser pagada en su propia moneda;

5. Emprender los esfuerzos sostenidos necesarios para el desarrollo económico, lo que supone apoyar constantemente y asumir progresivamente la responsabilidad financiera de la administración de los proyectos iniciados bajo auspicios internacionales a petición suya:

6. Publicar informaciones o proporcionar, para fines de estar dio y análisis, informes adecuados para su publicación, respecto a los resultados de la asistencia técnica prestada y a la experiencia que se deriva de éstos, a fin de que puedan aprovecharla otros países y las organizaciones internacionales que presten asistencia técnica;

7. Informar a las organizaciones participantes, cada vez que pidan asistencia técnica, acerca de toda la asistencia que ya están recibiendo o hayan solicitado de otras fuentes para la misma clase de desarrollo;

8. Dar publicidad al programa en el interior de su país.

Deberá recordarse que el programa ampliado tiene como finalidad el desarrollo económico. Como en cualquier programa nacional de esta naturaleza, los servicios que progresivamente vaya estableciendo un gobierno, a la larga, sólo pueden sostenerse por medio de la producción nacional, y, en consecuencia, el Consejo Económico y Social ha sugerido que, dentro del programa de asistencia técnica "convendrá dedicar especial atención, al establecer un calendario y un orden de importancia, a las actividades capaces de redundar en un pronto incremento de la productividad nacional en recursos materiales y humanos".

El propósito de la asistencia técnica es el de suministrar el consejo necesario que permita a los gobiernos realizar ellos mismos la labor. Este consejo, además de su valor intrínseco, puede en realidad constituir una ayuda positiva para la adquisición de otros medios, tales como inversiones de capital y suministro de equipo. Las solicitudes específicas para la obtención de equipo y materiales podrán tomarse en consideración sólo cuando formen parte integrante de un proyecto de asesoramiento.

En algunos países se necesita introducir el uso de equipos modernos para reducir los costos.

Cortesía de Hister Company, Portland, Oregón.

Consultas

La elaboración de un proyecto de asistencia técnica tiene que pasar por diversas etapas. En el informe de las Naciones Unidas titulado Asistencia Técnica: Programa Cooperativo Ampliado, publicado en 1949, se describieron los tipos de asistencia técnica que la FAO podría proporcionar. Otras series de proyectos, cuya iniciación inmediata es conveniente, fueron preparadas más adelante para que los representantes del Director General las utilizaran en sus discusiones con las autoridades nacionales. Estas discusiones personales se llevaron a cabo en muchos países durante el verano de 1950, y como consecuencia de ellas la FAO recibió varias solicitudes preliminares, en forma de cartas, en las cuales se daba una indicación general de lo que un gobierno está haciendo o se propone hacer en pro del desarrollo económico de su país, de la contribución que puede ofrecer en cuanto a su propio personal y fondos, del tipo de asistencia especial que requeriría y de las gestiones que había hecho o intentaba hacer ante otros organismos o gobiernos para obtener un ayuda análoga.

Muchas máquinas modernas - un helicóptero en este caso - pueden ser económicamente empleadas para una gran diversidad de fines, desde el de elevar censos forestales hasta la producción contra incendios

Cortesía del Servicio Forestal de los Estados Unidos

En muchos países no existe todavía un concepto muy claro sobre la mejor forma en que las organizaciones internacionales como la FAO pueden proporcionarles ayuda. Se espera, por tanto, que dichos países acudan a los miembros del personal de la FAO que actúa en las regiones respectivas, a solicitarles ayuda para la formulación de programas de asistencia técnica. Estos funcionarios pueden también aconsejar eficazmente en la selección de los proyectos que merecen prioridad entre los que el gobierno respectivo desea presentar.

Solicitudes

Después de las cartas de consulta y de las informaciones subsiguientes suministradas en el terreno o por correo, el gobierno correspondiente presenta a la FAO una solicitud oficial de asistencia técnica.

En principio, se espera que las solicitudes de asistencia técnica en el ramo de silvicultura y productos forestales correspondan solamente a proyectos específicos contemplados en un programa forestal completo que se base en un conocimiento preciso de los recursos de un país, es decir, en un inventario de los recursos forestales y en la política forestal respectiva. No obstante, es conocido el hecho de que muchos países no disponen de un inventario de esta naturaleza en el cual puedan basar programas coordinados de trabajo, ni han seguido una política forestal determinada.

En estas circunstancias, se espera que las primeras solicitudes oficiales que se hagan a la FAO se refieran a la ayuda que la Organización pueda prestar en la preparación de inventarios y en la formulación de una amplia política forestal. Esta iniciación puede parecer algo abstracta, pero la tramitación del proyecto puede acelerarse sin perjudicar los resultados. Como la formulación de un plan demasiado general que comprenda la aplicación de medidas puramente administrativas podría desilusionar a los gobiernos, los cuales esperan resultados prácticos inmediatos, las investigaciones fundamentales de carácter general pueden ser aceptadas fácilmente si se les agrega ciertos proyectos específicos que hayan sido examinados detenidamente tanto por los técnicos nacionales como por los miembros del personal de la FAO.

Se debe hacer una distinción entre los dos tipos de países que pueden solicitar asistencia técnica: los que tienen servicios forestales bien establecidos, y los que hasta ahora no los tienen o disponen sólo de un personal básico muy pequeño.

Los países que cuentan con personal adecuado disponen de técnicos completamente familiarizados con las condiciones y con la potencialidad de los recursos nacionales y quienes están ampliamente capacitados para seleccionar los proyectos en cuya ejecución la ayuda de las Naciones Unidas puede ser realmente valiosa.

Estos técnicos están también en condiciones de saber hasta qué punto sus gobiernos son capaces o están deseosos de ejecutar los proyectos que ellos puedan solicitar, y de darse perfecta cuenta de que es de lo más imprudente emprender ni siquiera la investigación preliminar de un proyecto, si no existe una posibilidad razonable de obtener los fondos para realizarlo íntegramente.

Deberá tenerse presente que una de las principales dificultades que se presentan en la ejecución de un programa de asistencia técnica puede ser la falta de suficientes peritos o técnicos dentro del propio país. En este caso, el servicio más valioso para dichos países podría consistir en ayudar a capacitar el personal especializado, antes que iniciar directamente proyectos individuales de fomento. Esta ayuda podría proporcionarse en forma de becas para que los técnicos viajaran a capacitarse en el extranjero, siempre que esta preparación estuviese directamente relacionada con el programa de desarrollo económico del país. Desde luego, un aspecto vital en la labor de los expertos internacionales que están suministrando la ayuda solicitada para ejecutar cualquier proyecto particular, será también el adiestramiento del personal local que más tarde deberá hacerse cargo del programa.

En lo que respecta a los países que ano no cuentan con personal especializado en silvicultura, se espera que primero soliciten ayuda para la organización de un servicio forestal, capacitación de técnicos y formulación de una política forestal y un programa de trabajo general.

Acuerdos

Una solicitud oficial presentada a la FAO para que ésta preste asistencia técnica puede ser aprobada directamente por el Director General o bien, en ciertas circunstancias que hay que considerar cuando otros organismos internacionales deben trabajar conjuntamente, ser referida a la Junta de Asistencia Técnica de las Naciones Unidas. Siempre que la naturaleza de la ayuda solicitada lo permita, deberá hacerse todo esfuerzo para coordinar los programas de asistencia técnica en una escala regional.

Ejecución

Una vez que la solicitud oficial y las providencias administrativas y presupuestarias consiguientes hall sido aprobadas, el Director General de la FAO y el representante del gobierno interesado subscriben un acuerdo, cuyo texto está ya establecido. El siguiente paso es la selección de los expertos que deben enviarse al país respectivo. En la selección de expertos extranjeros, se considera esencial el escoger individuos de la más alta competencia profesional, que tengan simpatía por el país al cual van a ayudar, que conozcan sus antecedentes culturales y sus necesidades especificas y que posean la capacidad necesaria para adaptar los métodos de trabajo a las condiciones locales, tanto de orden social como material.

Los expertos deberán estar preparados y dispuestos a trabajar en el campo, ano en condiciones difíciles, ya que frecuentemente los trabajos teóricos e investigaciones científicas deberán dejarse para más adelante. En muchos casos será esencial la especialización en silvicultura tropical.

En lo que respecta a la contratación de técnicos, hay que advertir que no existe ningún grupo de expertos que estén sencillamente esperando a que los llamen. Cada proyecto implica la búsqueda de los expertos requeridos, los cuales son difíciles de encontrar. La FAO ha preparado listas de los expertos disponibles, tomando como base los nombres transmitidos por los gobiernos e instituciones técnicas, o recomendados particularmente. Algunos de estos expertos desean prestar sus servicios solamente durante períodos de corta duración y otros sólo por períodos de un año o más. Por lo tanto, la selección de cualquier proyecto no es un asunto fácil.*

* Los expertos reciben sus remuneraciones de acuerdo con las escalas de salarios establecidas, gastos de viaje y viáticos, y tienen derecho a otros privilegios en circunstancias especiales.

Una vez seleccionados, las Naciones Unidas esperan que estos expertos internacionales colaboren estrechamente con los técnicos locales, ya que aquellos necesitarán del consejo de éstos, tendrán que trabajar conjuntamente con sus colegas locales y más tarde deberán depender de ellos para la ejecución de las medidas recomendadas.

Inspección

El nuevo programa contempla el envío de numerosas misiones, que tendrán objetivos con frecuencia similares y estarán integradas por grupos necesariamente pequeños de expertos competentes. Esta circunstancia por sí sola crea muchas dificultades de carácter administrativo, que obligan a que la organización de la empresa, en su totalidad, se haga con sumo cuidado.

La vigilancia que se ejerza desde las oficinas centrales se efectuará en forma que permita una máxima libertad de acción a las misiones y flexibilidad en el programa general. Hasta donde sea posible, se acudirá a las oficinas regionales para que impartan instrucciones a los expertos en lo que concierne a la política general y a los aspectos técnicos de sus comedidos; para que inspeccionen el desarrollo general de los proyectos particulares, y para que ayuden a dichos expertos en sus trabajos, en particular cuando éstos tengan que redactar sus informes finales. Corresponden a las oficinas centrales la elaboración de los informes oficiales que sobre el progreso general del programa presentará la FAO a la Junta de Asistencia Técnica de las Naciones Unirlas y al Comité de Asistencia Técnica del Consejo Económico y Social.

Resultada de la Asistencia Técnica

La realización efectiva de un programa de asistencia técnica, es decir, el cumplimiento de las recomendaciones formuladas y la ejecución de los proyectos planeados por los expertos, descubrirá la existencia de numerosos problemas. Cierto es que la ejecución de cualquier proyecto corresponde, en realidad, al gobierno respectivo y sólo a él. Sin embargo, la asistencia técnica proporcionada por las Naciones Unidas y sus organismos no deberá ser considerada como un esfuerzo esporádico. Tal ayuda es más bien una oportunidad que se brinda para realizar una acción particularmente efectiva, utilizando métodos y medios distintos, que deberán incorporarse a un programa mundial de trabajo a largo término. Por esta razón, la FAO, como parte de su programa normal de trabajo, continuará proporcionando ayuda técnica directa a los gobiernos que la soliciten, si bien esta ayuda estará forzosamente limitada por la cuantía de su presupuesto ordinario y por las asignaciones hechas dentro de éste para otras actividades que los gobiernos miembros esperan que la FAO ejecute. Parte de la asistencia técnica suministrada con los fondos del presupuesto ordinario servirá probablemente de base para el trabajo que se realice en el futuro de conformidad con el programa ampliado, tal como ha ocurrido con las misiones enviadas por la FAO a Austria y a Nicaragua a principios de este año. En cambio, otras actividades que la FAO ejecute, dentro de su presupuesto normal, serán una secuela de la asistencia técnica que se haya suministrado dentro del programa ampliado. Sin embargo, el nuevo programa se llevará a la práctica como una empresa independiente y completa en sí misma, hasta donde sea posible. Los gastos generales y los de administración se reducirán hasta donde sea posible, a fin de que las contribuciones de los países al fondo especial puedan utilizarse, en máxima proporción, para el suministro directo de asistencia técnica a los países beneficiarios

Hasta hace poco, el Punto Cuatro no era un programa sino más bien un estado de ánimo. En la actualidad, sus proposiciones están comenzando a transformarse en un plan viable. Pero la asistencia técnica por sí sola no puede ofrecer sino resultados limitados. Tiene que ir acompañada del deseo de los países de ayudarse a sí mismos, según se señaló en el informe definitivo de la reciente Misión de las aciones Unidas para la Investigación Económica en el Medio Oriente:

"Los conocimientos técnicos y científicos pueden contribuir a elevar los niveles materiales de vida en las regiones insuficientemente desarrolladas. El mejor aprovechamiento de las aguas y de las tierras, la lucha contra las enfermedades y las plagas y finalmente su erradicación, el aumento en la producción y distribución de artículos acabados y la difusión de la educación, requieren la aplicación de los conocimientos del hombre o de lo que éste puede descubrir acerca de la capacidad productiva de los recursos humanos y materiales.

"Pero los altos niveles de vida no pueden pasarse de unos seres a otros como un obsequio. Una economía mejorada no se la puede obtener como un paquete que se vende o se regala en un mercado. Un alto nivel de vida tiene que surgir de la aplicación de la habilidad y del ingenio humanos a los recursos físicos de un país o de una región.

"Las naciones más adelantadas del mundo no han construido su camino hacia el éxito sólo Con deseos o buenas intenciones. Trabajando y arriesgándose, han arrancado a las entrañas de la tierra, a los suelos, a los bosques y a los ríos las riquezas que éstos son capaces de producir. Estos países aunaron sus energías y sus recursos por medio de tributaciones y empresas de interés colectivo, con el fin de descubrir nuevos métodos para hacer las cosas. Trabajaron, inventaron, formaron a sus niños, e invirtieron sus ahorros en empresas nacionales y particulares. Todo esto tienen que continuar haciéndolo si han de mantener el nivel de vida que han logrado alcanzar.

"No hay nada que pueda substituir al propio esfuerzo y a las empresas nacionales para sacar provecho de los recursos de un país. Ayudar a los que tienen el propósito de ayudarse a sí mismos debe ser la política primordial que guíe y encauce el deseo que tienen las regiones más desarrolladas del mundo para ayudar a las regiones menos afortunadas".

Una pequeña maquinita de desbastar madera montada en un jeep hace posible el aprovechamiento de partidas pequeñas.

Cortesía de Fitchburg Engineering Corporation, Fitchburg. Massachusetts.


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