Página precedente Indice Página siguiente


La silvicultura en Israel

por René Karschon

Instituto de Investigaciones del Departamento de Montes, Ministerio de Agricultura, Israel

El Estado de Israel tiene una extensión de 20.600 km2 de los cuales, 49.000 Ha., equivalentes al 2,4 por ciento, están clasificadas como «reservas forestales» y sujetas a la inspección del Departamento de Montes del Ministerio de Agricultura.

Unas 16.000 Ha. de estas reservas han sido plantadas en los últimos 50 años y desde que se constituyó el Estado independiente se han creado 760 km. de rompevientos y avenidas a los lados de las carreteras. La mayor parte de las reservas forestales consisten en matorral en un estado más o menos avanzado de degradación, debido a una errónea utilización, común en otros tiempos a todos los países del Mediterráneo, y a la consiguiente erosión del suelo.

Geografía forestal

Pueden distinguirse tres regiones bien determinadas:

1. La región mediterránea, al norte de la frontera de Gaza-Hebron, caracterizada por una precipitación pluvial superior a los 400 mm., llegando a 1.000 mm. en las montañas de Galilea. En un tiempo estaba densamente cubierta de bosques, pero ha quedado convertida en monte bajo. La llanura costera de unas 20.000 Ha., parcialmente bordeada por dunas, está formada por suelos arenosos pardo-rojizos; durante el último siglo aún existían grandes masas de Quercus ithaburensis, pero hoy sólo se conservan algunos árboles aislados. El pino de alepo (Pinus halepensis) está circunscrito a los suelos rendzina, derivados del Cenomanianse superior, y se encuentra en las laderas orientales del Monte Carmelo y en algunos otros parajes de Galilea conservados como reliquia, así como en las cercanías de Jerusalén. El matorral de Q. ithaburensis, que a voces llega a alcanzar una formación abierta, se limita a las elevaciones poco pronunciadas y también medra en suelos rendzina, mientras que en los terra rosa, que es el tipo más común de suelo de montaña, se encuentra matorral de Quercus calliprinos. En suelos rendzina y terra rosa de montaña prosperan los montes abiertos de algarrobo (Ceratonia siliqua), e incluso en la llanura costera, donde crecen en arenisca calcárea meteorizada o en dunas fijadas. En el curso de los ríos y en los valles son características las especies hidrófitas tales como Platanus orientales, Fraxinus syriaca, Salix sp. y Nerium oleander. Entre las otras especies del matorral mediterráneo cabe mencionar Acer syriaca, Arbutus andrachne, Crataegus azarolus, Laurus nobilis, Pistacia sp., Quercus infectoria, Rhamnus sp. y Styrax officinalis.

La región mediterránea está densamente poblada y toda la tierra propicia a la labranza está explotada agrícolamente, ayudándose en parte con el riego. La superficie principalmente de aptitud forestal se calcula en 150.000 Ha., esto es, un 7,3 por ciento de la superficie total de Israel.

2. La región esteparia (Irano-Turaní) alrededor de Beersheba, al norte del Negeb, caracterizada por una precipitación pluvial de 150-400 mm. al año. El suelo típico de esta vasta llanura ondulada está formado por depósitos de loes eólicos parcialmente cubiertos de arena y la especie más importante es Tamarix articulata aunque hoy sólo pueden encontrarse ejemplares aislados En esta región, esencialmente agrícola, el cultivo de regadío y la completa mecanización han desplazado los sistemas primitivos de cultivo de cereales de invierno (cebada).

El valle del Jordán medio, entre Tiberiades y Beisan, y las montañas basálticas al oeste del río, forma también parte de la región Irano-Turaní. La precipitación anual asciende a 300-450 mm. La mayor parte de la región está cubierta por suelos basálticos o margosos. Sólo se encuentran algunos ejemplares aislados de Pistacia atlantica y Zisyphus spina-christi.

3. La zona desértica (Saharo-Sindí), al sur del Negeb, constituye el resto del país, al sur de Beersheba. La precipitación anual es inferior a los 150 mm. y los habitats más comunes son arenas movedizas y «hammadas» (mesetas desérticas pedregosas). La vegetación arborescente está formada por árboles aislados o bosquetes circunscritos a los «wadis» de las montañas y llanuras. Las especies principales pertenecen a los géneros Acacia y Tamarix. En algunos lugares se practica aún la agricultura nómada.

Objetivos de la política forestal

La finalidad de la silvicultura es crear y mantener masas forestales sanas, capaces de servir a los muchos fines para que están designadas. El bosque debe, en principio, ejercer una función protectora, y en particular proteger al suelo contra la erosión, fijar las arenas movedizas, y corregir el régimen hidrológico. Debe también servir para producir diversas categorías de madera para usos particulares (madera aserrada, traviesas o durmientes de vía, postes, etc.) echando así los cimientos para la creación de una verdadera industria de la madera, que pueda con rapidez y provecho absorber una considerable mano de obra. Actualmente, los bosques asistentes no pueden satisfacer las enormes necesidades de madera de construcción y el país ha de recurrir sobre todo a la importación. Recientemente se ha iniciado la fabricación de masonita con desechos de maderas indígenas e importadas, estando tal actividad combinada con una gran fábrica de contrachapados. Asimismo se está construyendo una fábrica de papel, que inicialmente se servirá de pasta de madera importada.

En las tierras designadas como reservas forestales el Departamento de Montes está realizando labores de repoblación, y también se ocupan en tal actividad instituciones nacionales, tales como el Fondo Nacional Judío, comunidades y particulares. La política del Departamento de Montes es estimular cualquier empresa de repoblación, proporcionando gratis y sin limitación las plantas que se soliciten.

Técnicas de repoblación

Las plantas se producen en los viveros en botes de hojalata o en macetas fabricadas localmente con cemento o arcilla. Cuando alcanzan una edad de 8 a 12 meses, se trasplantan con cepellón. Para las especies más importantes sólo se utiliza la semilla de árboles padres seleccionados.

En la región mediterránea se están repoblando suelos montañosos muy erosionados, no aptos para ningún otro cultivo. Las especies más utilizadas son Pinus halepensis, P. brutia, P. pinea, Cupressus sempervirens, y Ceratonia siliqua. La preparación del terreno consiste en la construcción de terrazas o excavación de casillas, combinándose ambas a veces. Los cuidados que suceden a la plantación consisten en varias sachaduras en los dos primeros años y en la reposición de marras. Se han conseguido buenos resultados por siembra directa o plantando plantones de coníferas. En todas partes se han hecho plantaciones lineales de abetos.

Luego las operaciones consisten en podas y aclareos. Los Eucalyptus camaldulensis (= E. rostrata) y Casuarina equisetifolia se utilizan para los bordes de carreteras y se los riega dos o tres veces durante los dos primeros años. El Cupressus sempervirens se suele adoptar para rompevientos. Las dunas se fijan plantando Acacia cyanophylla y Eucalyptus camaldulensis, en combinación con hileras de Artemisia monosperma. La plantación se hace en casillas de unos 40 cm. de profundidad, de forma que sólo sobresalgan unas cuantas hojas. Las Tamarix sp. se reproducen en las donas por estaca y el Ricinus communis se siembra.

Las plantaciones de eucalipto se explotan de la misma forma que los tallares simples con una rotación media de 7 a 8 años, produciendo postes de diferentes tamaños. La madera de aclareo de los rodales de coníferas, se utiliza como postes y como madera aserrada para cajerío, etc.

Los bosques naturales degradados se rehabilitan prohibiendo el pastoreo, sobre todo de ganado caprino, o por medio de plantaciones de coníferas, bajo cubierta cuando existen claros que permiten el crecimiento de dos masas. Cuando es necesario, se practican operaciones de poda, recorte y aclareo.

En la región Irano-Turaní se ha realizado una extensa labor de repoblación en los suelos basálticos que rodean la ciudad de Tiberiades. La construcción de terrazas y la plantación de Acacia cyanophylla y Eucalyptus camaldulensis han detenido con éxito la erosión del suelo, y ahora protegen eficazmente la ciudad y las carreteras contra las inundaciones.

En el norte del Negeb se han emprendido desde la fundación del Estado considerables plantaciones de rompevientos y avenidas a los lados de las carreteras. El trasplante y el subsiguiente mantenimiento se realiza con aperos de tiro por tractor. Las especies principalmente usadas son Tamarix articulata, Eucalyptus camaldulensis y Acacia cyanophylla. También se utilizan para combatir la erosión a lo largo de los «wadis» que abren profundas gargantas en los loes y para fijar las dunas interiores.

Legislación

Desde la fundación del Estado, el Gobierno ha reconocido la gran importancia de los bosques para el país y el Primer Ministro ha dado a conocer un proyecto de plantación de 100 millones de árboles en 10 años. Sin embargo, la realización práctica de este proyecto es en estos momentos problemática, por dificultades de presupuesto.1

[1 Un asesor de la FAO visitó el país durante tres meses en 1953 para analizar y orientar el programa general de silvicultura.]

La Ley de Montes, perteneciente a la época del mandato británico, sigue siendo válida, y todavía no se ha aprobado oficialmente un anteproyecto de ley corregido y preparado por el Departamento de Montes. No obstante, el Parlamento ha aprobado ya una ley que regula el pastoreo de ganado caprino, y el Departamento de Montes está tomando las medidas necesarias para hacerla entrar en vigor.

Educación e investigaciones forestales

En el país no existen oportunidades para cursar estudios superiores de silvicultura y la falta de personal con grado universitario constituye un serio obstáculo. El Departamento de Montes organiza cursos teóricos y prácticos todos los años para el personal subalterno.

En 1939 se creó un Instituto de Investigaciones Forestales, dependiente del Departamento de Silvicultura, y que funciona bajo la dirección de un Conservador de Bosques. Está situado en Ilanoth y consta de tres secciones que tratan de ecología y silvicultura, protección de montes y tecnología de la madera. El Instituto posee laboratorios bien dotados y cuida de muchas parcelas experimentales diseminadas por todo el país. Existe también un arboreto de 80 dönüms 2 en Ilanoth, anejo al Instituto.

[2 1 dönüm = 0,22 acres, o sea 0,089 Ha.]

Este Instituto no puede abarcar todos los aspectos de la ordenación y economía forestal del país. Seguidamente se resumen los problemas estudiados durante sus tres años de existencia. Con toda evidencia existen muchos otros problemas que merecen atención, y se espera que las actividades del Instituto continúen ampliándose.

Programa de investigaciones forestales: Considerando la gran importancia concedida a la repoblación en los últimos años, es natural que se dirija una especial atención a los problemas relacionados con la creación de nuevos bosques. Se adoptó el uso exclusivo de semillas procedentes de árboles padres seleccionados de las principales especies, para así mejorar la calidad de los futuros rodales. También se han hecho abundantes investigaciones sobre los diferentes aspectos de las operaciones de vivero; se han estudiado métodos de tratamiento previo de las semillas y se ha investigado la periodicidad de germinación de diferentes especies. Se han ensayado diversos métodos de siembra y nuevos procedimientos para proteger las semillas contra hongos y roedores. También se ha tratado de determinar la mejor época para la siembra y repicado de los plantones, estudiándose la influencia del suelo sobre el crecimiento de las plantas.

Otros trabajos se refieren a técnicas de repoblación, en particular a la plantación en casillas y en terrazas, efectuándose experimentos comparativos de siembra directa y plantación por plantones.

La elección de especies para plantar o repoblar diferentes lugares es, por supuesto, de capital importancia. A este fin se han creado parcelas experimentales para el ensayo de especies de nueva introducción y para comparar su crecimiento con el de las especies anteriormente utilizadas. Además, se están iniciando investigaciones sobre la ecología de las especies principales. Entre los factores investigados, se ha dirigido una particular atención a las exigencias de agua de las plantas (resistencia a la sequía, transpiración) y a sus requisitos de suelo.

El Instituto se ocupa también de cuestiones silvícolas. Están en marcha estudios sobre sistemas de poda, y se han creado parcelas experimentales para determinar los efectos del aclareo selectivo.

Entre las actividades del Instituto se cuentan asimismo investigaciones sobre la posibilidad de plantar árboles en Wadi el 'Araba. Tras un estudio preliminar ecológico de las plantas indígenas, realizado en colaboración con el Departamento de Botánica de la Universidad Hebrea, el Instituto ha trazado los métodos de siembra y trasplante de árboles en Wadi el 'Araba. En Ein Hosub existe un vivero experimental. Recientemente se ha dado término a un estudio edafológico y ecológico del tipo más común de suelo, el llamado «hammada». Se han destinado parcelas experimentales para perfeccionar los métodos de plantación y determinar cuáles son las especies que demuestran tener mayor capacidad de adaptación al medio ambiente. Se está investigando la resistencia a la salinidad y a la sequía y la transpiración de las principales especies leñosas.

En cuanto a la protección de montes, el Instituto de Investigaciones está realizando un inventario de todos los insectos forestales y plagas de la madera. Se han efectuado algunos estudios especiales sobre la biología de Matsococcus, plaga principal del pino de Alepo, y de sus parásitos y lucha biológica con Chrysopa spp. También están en marcha otros estudios sobre la biología de Phorocantha y Lyctus, plagas de la madera de eucalipto y se han impregnado los postes con cloruro de zinc para proteger la madera contra el ataque de insectos y hongos. También se ha elaborado un método químico de lucha contra la oruga procesionaria del pino.

Programa de investigaciones sobre productos forestales: Se han realizado estudios preliminares, dentro del campo de la tecnología y aprovechamiento de la madera, en cuanto a la identificación y anatomía de las plantas leñosas indígenas. Está en estudio el empleo de maderas locales y exóticas, tales como el pino y el eucalipto, y las investigaciones tienden no sólo a determinar sus posibles y variados usos finales, sino también sus características físicas y mecánicas y el curado adecuado. Además, están en marcha otros trabajos sobre resinación y carboneo. Por ser necesario para un aprovechamiento racional de la madera un adecuado conocimiento de las especies que pueden cultivarse, se está realizando un estudio sobre la capacidad productiva y existencias de madera en pie en los bosques.

Futuro

En Israel existe una floreciente Sociedad Forestal que comprende un cierto número de silvicultores y amantes del bosque; publica una revista periódica y organiza excursiones y conferencias. Según una antigua tradición, las gentes celebran todos los años la «Fiesta del Arbol», siendo la costumbre que en tal ocasión todos, jóvenes y viejos, planten árboles.

En conjunto y a pesar de las dificultades políticas, económicas y sociales con que ha de enfrentarse el joven Estado de Israel, la economía forestal parece ciertamente llevar una satisfactoria marcha progresiva.


Página precedente Inicìo de página Página siguiente