Reunión técnica sobre el pastoreo en los montes
Actividades de asistencia técnica
Conferencia sobre el álamo en el Cercano Oriente
En Roma, en las Oficinas Centrales de la FAO, del 29 de marzo al 3 de abril de 1954 una Reunión Técnica sobre el Pastoreo en los Montes, la primera en su género que se ha organizado. Participaron en ella un total de 41 representantes de 24 gobiernos,1 observadores oficiales de la Administración de Actividades Exteriores de los Estados Unidos y de la Unión Internacional de Organizaciones de Investigación Forestal, así como otros varios observadores no oficiales.
[1 Alemania, Austria, Birmania, Cuba, Dinamarca, Ecuador. España, Estados Unidos, Filipinas, Finlandia, Francia, Grecia. India. Indonesia, Irán, Islandia, Israel, Italia, Jordania, Pakistán, República Dominicana, Reino Unido, Suiza, Turquía. ]
La Reunión se inauguró con un discurso de bienvenida pronunciado por el Director General de la FAO, y después el Director de Silvicultura expuso las razones que motivaron la convocatoria de la Reunión.
En seguida se procedió a las elecciones, resultando Presidente el Sr. J. F. Pechanec (Estados Unidos de América), y primero y segundo Vicepresidentes, respectivamente, los Sres. R. Koblet (Suiza) y A. Latessa (Italia). El Sr. J. P. Challot (Marruecos) fué elegido relator.
Política
En el informe sobre la Reunión - que está a disposición de quienes lo pidan - los delegados reconocieron que, además de las tierras consideradas por todos como tierras forestales, existen grandes superficies que interesan sobremanera a los silvicultores, aun cuando en ellas los bosques raleen o falten por completo o independientemente de que los rodales sean de calidad muy pobre o incluso escasos o irregulares, al emplear los términos de «pastizales arbolados» y «pastoreo en los montes» se hace referencia a dichas tierras.
En ciertos países de las regiones húmedo-templadas, cuyas condiciones ecológicas son especialmente favorables y donde se ha llegado a un alto grado de adelanto técnico, esas tierras se están aprovechando intensamente, a voces completamente aparte de las tierras de pastoreo y las tierras madereras. En el resto del mundo esas tierras suelen dedicarse al apacentamiento ilimitado y, con frecuencia, abusivo y caótico del ganado vacuno o los animales silvestres, por más que desempeñan y deberían desempeñar tuna función mucho más importante, como complemento de las zonas totalmente arboladas, proporcionando protección contra la erosión anormal y sirviendo como factor regulador del abastecimiento de aguas.
Dada su importancia económica y su función protectora, dichas tierras, devastadas con tanta frecuencia por el pastoreo abusivo, las quemas y las cortas, deberían ser objeto de una política racional de conservación y de aprovechamiento, dentro del mareo general de una política nacional de conservación de suelos, tendiente a asegurar el mejor equilibrio posible entre las tierras labrantías, las forestales y las de pastoreo.
Cada gobierno tiene la responsabilidad de elegir el servicio o servicios administrativos que se encarguen de establecer y poner en práctica la política especial que debe aplicarse a esas zonas. De hecho, muchos países han incorporado ya todos esos pastizales arbolados, o parte de ellos, a las tierras forestales de dominio público en los casos en que eran de propiedad del estado y, cuando eran de propiedad privada, han encomendado a los servicios forestales la tarea de estudiar la política que se les debe aplicar, y de ayudar a los propietarios a poner en práctica dicha política.
En los casos en que se les hayan encomendado esas regiones por un período más o menos largo, los servicios forestales deberán trazar sus planes de modo tal que el aprovechamiento sea doble, y en muchos casos múltiple; solución que sería la más adecuada desde el punto de vista económico y social.
Hay que hacer estudios generales sobre la situación de los pastizales arbolados de cada nación, con objeto de recoger datos que sirvan de base a las políticas y a los programas de acción. Es necesario realizar estudios intensivos locales que permitan la aplicación de las políticas nacionales a determinadas zonas, y para que tales estudios se lleven a cabo en forma eficiente hay que contar con un personal bien capacitado.
La Reunión reconoció que el uso de la tierra varia de un país a otro y que existen profundas diferencias entre las diversas formas de propiedad y de aprovechamiento de las tierras forestales. Para administrar eficazmente el suelo y el agua, y para explotar económicamente el forraje y la madera que producen los bosques, hay que aplicar diferentes técnicas y procedimientos administrativos de acuerdo con las condiciones propias de cada país.
Sin embargo, existen ciertos principios fundamentales que, independientemente del país de que se trate deben normar la formulación y ejecución de una buena política de pastoreo en los montes, y la Reunión preparó un borrador de los principios que en su opinión, deben recomendarse a los gobiernos, y los remitió a la consideración de las Comisiones Regionales de Silvicultura de la FAO.
Aspectos técnicos
A fin de proteger y mejorar la producción de madera y forraje, el suelo y el agua, el pastoreo en los pastizales arbolados debe organizarse científicamente, teniendo en cuenta las necesidades de las plantas forrajeras, los árboles y el suelo.
La Reunión convino en lo siguiente:
1. el pastoreo en los montes debe regularse en la medida en que lo haga necesario el plan general de aprovechamiento de la tierra para los otros recursos;2. el fuego puede ser un instrumento útil, aunque peligroso, en la ordenación de los pastizales arbolados y, por lo mismo, debe emplearse con suma prudencia;
3. como los pastizales arbolados constituyen frecuentemente gran parte de las vertientes importantes, la manera de ordenar el pastoreo, en ellas ejerce un efecto preciso en la calidad, cantidad y período de afluencia de las aguas que vierten en las corrientes;
4. a menudo, la migración de los rebaños es una forma de administración conveniente y necesaria para aprovechar los forrajes en la época en que son más nutritivos y abundantes, pero habría que aplicar un sistema de regulación administrativos que impidiera la entrada de demasiados rebaños en ciertas regiones limitadas;
5. hay ciertas medidas especiales que pueden justificarse para mejorar los pastizales arbolados, tales como la resiembra, el trasplante de plantas o renuevos, el abono, la erradicación de los vegetales pratenses competidores y no convenientes, y la lucha contra las plagas de insectos y roedores;
6. en casi todas las regiones del mundo los pastizales arbolados producen sólo una fracción del total forrajero que se necesita para alimentar el ganado todo un año por lo que el forraje se tiene que producir con abundancia en otros pastizales a base de pastos mejorados, así como con otros cultivos propios para la alimentación animal;
7. al hacer los planes de ordenación forestal y de pastizales hay que tener en cuenta los animales herbívoros salvajes, cuyo número debe mantenerse en equilibrio con el forraje disponible mediante su sacrificio metódico;
8. el suministro forrajero que por medio del ramoneo directo, la poda o de cualquier otra manera, ofrecen el follaje, las flores y frutos de los árboles, sólo es aceptable si está estrictamente regulado.
Administración
Los pastizales que hay en las tierras forestales de propiedad del gobierno, o controladas por éste, constituyen un fideicomiso público que se debe administrar y aprovechar en beneficio de todo el país. El problema de cuáles tierras deben dedicarse a pastizales arbolados depende, esencialmente, de los usos que asigne a las tierras el gobierno. Y esta asignación debe basarse en una ponderada evaluación técnica de las posibilidades que ofrezcan el pastoreo la madera y las aguas, así como de otros valores útiles.
La administración de estas tierras forestales debe estar a cargo de personas que sean científica y técnicamente idóneas.
Mientras más estrecha sea la relación entre el uso de los pastizales arbolados y el apacentamiento y la producción de forraje en las otras tierras, mayor será la medida en que unos y otras contribuyan al bienestar del país. El objetivo de tal relación será el de establecer unidades ganadero productivas económicamente equilibradas, organizadas de forma que toda la tierra rinda beneficios adecuados y que el ganadero perciba un ingreso decoroso.
Debe mantenerse una cooperación general entre la organización administrativa y los usuarios de los pastizales arbolados. Al formular y poner en práctica la política y los reglamentos forestales hay que procurar la colaboración de los ganaderos que utilizan los apacentaderos forestales del gobierno, y hay que estimularlos para que reconozcan el papel que les corresponde en el aprovechamiento adecuado de esas tierras.
Importa que la administración esté eficientemente descentralizada.
Investigación
Las investigaciones deben estar a cargo de científicos bien preparados, y hacerse en completa coordinación con otras investigaciones forestales y agrícolas.
Cuando a los países solos les sea imposible emprender las investigaciones necesarias para satisfacer sus necesidades, pudiera resultar práctico unir a varios de ellos en programas regionales. Con esa regionalización se elimina la duplicación de los trabajos y se facilita la coordinación en el desarrollo de métodos perfeccionados.
Todas las organizaciones de investigación deben tener como política el publicar los resultados de sus labores a la mayor brevedad, y fomentar el intercambio de datos relativos a sus programas.
Educación y adiestramiento
En vista de la escasez de personal especialmente adiestrado en materia de ordenación de apacentaderos forestales, el asunto es de particular importancia.
Los programas de pastoreo en los montes sólo podrán llevarse a cabo eficazmente a base de un personal plenamente capacitado. Los que ocupen puestos más altos deberán tener educación universitaria o superior que les dé una sólida base para entender los problemas relativos a la ordenación de apacentaderos forestales. Si en el país no existen medios para enseñar la ordenación de pastizales, habrá que enviar a los jóvenes más dotados a estudiar a otras naciones donde tal enseñanza esté organizada. En muchas partes del mundo se necesitan con urgencia escuelas adicionales de este tipo. Probablemente resulte más económico organizar centros regionales de educación, que afanarse por organizar la enseñanza en cada país.
Durante algún tiempo, será forzoso que el personal ocupado directamente en la ordenación de los pastizales arbolados, y que carece de una instrucción adecuada, se capacite mientras trabaja mediante cursos breves sobre la materia.
Por otra parte se necesita en general intensificar la enseñanza en lo que respecta a los meterlos de divulgación.
Asistencia técnica
Deben hacerse todos los esfuerzos posibles para llevar la asistencia técnica de la FAO en materia de administración de pastizales arbolados a todos los países que se interesan en el asunto. Se sugiere por tanto que:
1. Se den instrucciones a los expertos de la FAO en Silvicultura, enviados en cumplimiento del Programa de Asistencia Técnica, para que se ocupen de los problemas del pastoreo en los montes y ayuden a los gobiernos a planear políticas aplicables a esas tierras;2. Se estimule a los expertos de la FAO en Silvicultura para que extiendan la asistencia a los pastizales que no sean bosque, en los países donde no haya un experto de la Organización en agricultura.
3. En ausencia de silvicultores de la FAO expertos en ordenación de pastizales, se aconseje a los servicios forestales de los países interesados que establezcan un estrecho contacto con los expertos de asistencia técnica, en materia de agricultura que se ocupen de los aspectos generales de los problemas relativos a los pastos y afines, tales como el sistema de distribución de las aguas, a fin de que les planteen sus problemas especiales referentes al pastoreo en los montes.
4. Se estimule a los servicios forestales para que envíen representantes idóneos a los seminarios regionales que sobre pastizales y pastos organice la FAO.
5. El tema de la política del pastoreo en los montes se incluya en los programas de todo seminario que sobre política forestal organice la FAO.
Durante el curso de los dos últimos años, en que el programa de asistencia técnica de las Naciones Unidas ha estado en pleno vigor, se enviaron misiones forestales a 35 países y 97 expertos completaron las diversas labores a ellos encomendadas. Aunque esta actividad no es tan intensa actualmente, debido a restricciones de orden económico que ojalá no pasen de ser transitorias, la FAO tiene todavía más de 25 técnicos forestales comisionados en 15 naciones. Hay esperanzas de que antes de salir el año de 1954 estas cifras aumentarán de modo apreciable al consignarse nuevos recursos para la ejecución de los trabajos. El sistema seguido hasta ahora, consistente en asignar partidas anuales destinadas a proseguir el plan entero, no ha resultado nada satisfactorio y por tal razón se está estudiando la forma que permita atender el programa con flexibilidad y continuidad mayores.
Como continuación del trabajo realizado por la misión original en el establecimiento de e nuevas industrias forestales, un funcionario se ha ocupado de investigar la mejor forma de combinar el manejo de trozas por medio de elefantes desde el lugar de apeo, con el uso de dispositivos mecánicos en las últimas etapas de extracción. Se espera que durante el ano empiece a trabajar una unidad experimental de explotación y adiestramiento. Se han iniciado ya las operaciones de prueba de un secadero piloto con horno para secar e impregnar la madera. Prosiguen las investigaciones acerca de la durabilidad y los efectos del clima tropical sobre las casas construídas con tableros de virutas fabricados en Alemania con madera birmana de especies secundarias (véase «Contribución al Aprovechamiento de las Selvas Tropicales», por K. A. Miedler, Unasylva, Vol. VII, N°. 1). La experiencia que se obtenga con estas casas, mostradas en la fotografía, ayudará a determinar sí la producción en serie de dichos tableros puede considerarse económicamente útil.
Paraguay. Un técnico continua en el cargo de asesor en materia de política general y aprovechamientos. Se anuncian diversos acontecimientos. El Paraguay está dispuesto a recibir cierto número de emigrantes de Europa y es posible que la colonización se combine con el establecimiento de nuevas industrias forestales y agrícolas.
Una brigada de expertos forestales que cumple su cometido en Chile desde 1951, ha realizado notables progresos en sus trabajos de asesoramiento sobre política forestal, silvicultura, ordenación y explotación de montes. Sus miembros han participado en la labor docente de la recién creada Facultad de Dasonomía de la Universidad de Santiago, y uno de ellos tiene a su cargo el centro de capacitación en explotación de montes y aserraderos, establecido en Llancacura con maquinaria suministrada por la FAO. La fundación de este plantel a pesar de un sinnúmero de dificultades que fue preciso vencer, puede representar uno de los triunfos más destacados de la misión. En la fotografía se ve un grupo de estudiantes adelantados de la Facultad de Silvicultura de la Universidad de Chile, después de un día de trabajo en el bosque, regresando a pie a sus hogares por una carretera en construcción que atraviesa tierras boscosas aclareadas en parte por pequeños propietarios en la Reserva de Llancacura, a 3 kilómetros del aserradero.
Libia. En 1951 se efectuó un estudio preliminar con miras a establecer la política forestal. Desde 1952 otro técnico ha estado ocupándose de cuestiones relativas a la fijación de dunas, plantación de bosques, de árboles de alineación a la vera de los caminos, y a estimular en general la de toda clase de árboles, Los métodos de conservación de suelos, el cultivo de árboles frutales y el aprovechamiento del esparto forman también parte del trabajo del experto, quien ayuda igualmente a formular leyes y reglamentos de silvicultura y utilización de las praderas.
Un funcionario de la FAO está prestando servicios como asesor en el uso de aperos mecánicos para desmontes, con el objeto de establecer plantaciones nuevas, y en la formación de viveros de árboles. Otro técnico montó un aserradero piloto y un taller de labrar madera para aprendices locales. Una parte de la maquinaria de esta instalación fué suministrada por la FAO y la demás por el Gobierno cingalés y el Peino Unido en virtud del «Plan Colombo». La fotografía muestra el talle; de reparación y acondicionamiento de las sierras.
México. Después de terminada en 1953 la labor de la primitiva misión general de silvicultura, un exporto fué nombrado con carácter de asesor forestal de la Nacional Financiera sobre reconocimientos y explotación organizada de los bosques. Esta entidad está ocupándose de varios proyectos industriales relacionados con los montes, de los cuales el que figura en primer lugar es el establecimiento de una fábrica de celulosa y de un consorcio de industrias forestales en Michoacán. Otro funcionario de la FAO terminó hace poco su misión referente a investigaciones sobre celulosa.
Tres especialistas han terminado los trabajos que tenían asignados y un experto está actualmente ayudando a dar los últimos toques en el establecimiento de un nuevo laboratorio de productos forestales, actuando al mismo tiempo como asesor general en la fundación de las industrias madereras, inclusive aserraderos, fábricas de chapas y de madera terciada, de muebles, de fósforos, da papel y de cartón. La distribución y los diversos tipos de selvas del Irán se muestran en el mapa esquemático adyacente.
1. Selvas de los distritos septentrionales, en la región del mar Caspio (3,3 millones de hectáreas).
2. Selvas calcícolas de montaña de los distritos nororientales (bosques de Juniperus (enebro): 1,3 millones de hectáreas).
3. Selvas de pistachero (alfóncigo) de los distritos del este, del sur y del sureste (2,6 millones de hectáreas). .
4. Robledales de los distritos del centro y del oeste (10 millones de hectáreas).
5. Montes arbustales de los distritos (desérticos) del Kavir, en la parte central y noroeste del país (1 millón de hectáreas).
6. Selvas subtropicales de la costa meridional (500.000 hectáreas).
Tailandia. Hay en Bangkok un especialista en instalación de aserraderos, que colabora en la preparación de planes para la modernización completa de los que pertenecen al Estado. Son objeto de estudio las cuentas de costos y jornales, con la mira de aumentar la productividad de la maquinaria y del personal actuales. Se están haciendo tanto la selección de la maquinaria moderna como los arreglos para su entrega e instalación. El experto interviene asimismo en el proyecto de construcción de un nuevo e importante aserradero.
Etiopia. Desde 1951 un funcionario ha estado actuando como asesor general en asuntos de montes. Se ha formado el núcleo de un Servicio Forestal, han sido enviados estudiantes a Australia para instruirse en la materia y se han dictado las leyes básicas sobre dasonomía. Entre sus trabajos, el experto ha incluído ciertos estudios de las condiciones climáticas, con el propósito de enriquecer los recursos forestales introduciendo especies exóticas no probadas aún.
Honduras. En un artículo del Noticiario Mundial que aparece en la página 99 se narra el establecimiento de un Servicio Forestal donde un técnico de la FAO en montes y otro del «Servicio Técnico Interamericano de Cooperación Agrícola» (STICA) de los Estados Unidos actúan como asesores, principalmente en lo relativo a legislación forestal, vigilancia de las exportaciones de madera, reserva de basquee, reconocimientos forestales, recolección de semillas y resinación. El experto de la FAO ha participado, además, en el estudio hecho por las Naciones Unidas sobre las posibilidades de desarrollo económico de las cinco repúblicas centroamericanas.
Indonesia. Como paso preliminar de una exploración general que habrá de emprenderse durante las postrimerías de 1954 sobre las posibilidades de establecer nuevas industrias forestales en Sumatra y Borneo, un funcionario de asistencia técnica está coadyuvando con el Servicio Forestal a elaborar planes para la explotación de montes en tres zonas típicas escogidas. Se harán recomendaciones sobre el uso más eficaz de los aperos mecánicos ya disponibles, indicando a la vez la clase de material que debe adquirirse todavía.
Brasil. En octubre de 1953, la misión original de la FAO presentó un amplio informe al Gobierno del Brasil acerca de los recursos forestales del valle del Amazonas. Una nueva misión ha emprendido la labor que se propagaba en algunas de las principales recomendaciones. Están organizándose algunos centros de capacitación, incluyendo uno para demostración de apeo y transporte de trozas, un aserradero-escuela con anexo para el mantenimiento y reparación de las sierras, y un taller de conservación de la maquinaria. Al propio tiempo, un experto se dedica a la interpretación de fotografías aéreas tomadas en zonas forestales elegidos para levantamientos topográficos.
En este país se mantiene un asesor general en asuntos forestales. Es posible que se establezca un centro de investigaciones y un instituto de capacitación regionales. Siria cuenta con magnificas zonas silvícolas. La fotografía muestra una de las mejores, el bosque de Latakia, que actualmente se está delimitando con claridad sobre el terreno.
En Damasco, del 5 al 9 de abril, se celebro una conferencia a la que asistieron alrededor de 25 delegados representando a Chipre Egipto, Francia, el Irak, Italia, Jordania, Líbano, Suecia, España, Siria Turquía y el Reino Unido. También enviaron observadores la Liga de Estados Arabes y el Organismo de Obras Publicas y Socorro, de las Naciones Unidas.
El Ministro de Agricultura, Sr. Hassan Atrach, inauguró la Conferencia en el «Gran Serrallo», estando presentes el Excmo. Sr. Ministro de Economía y otros muchos altos funcionarios del Gobierno sirio. Fué elegido Presidente el Sr. Atrach, y Vicepresidentes primero y segundo, respectivamente, los Sres. Rachid Habbal (Líbano) y Yacoub Salti (Jordania). El Sr. Osman Bradan (Egipto) fué nombrado relator general. El Sr. Ph. Guinier, Presidente de la Comisión Internacional del Alamo, fué designado Presidente honorario de la Conferencia.
Las diversas delegaciones informaron sobre la situación del álamo en sus respectivos países, y la Reunión pudo enterarse, con satisfacción de las medidas aplicadas por varios gobiernos en ayuda del cultivo del álamo. La demanda de maderas blandas para envases, sierra, chapas de desenrollo en torno y pasta para papel crece sin cesar. También son necesarios los álamos para formar barreras rompevientos que protejan los grandes cultivos en las zonas de regadío, y para mejorar los bosques naturales que crecen a lo largo de los ríos. El álamo proporciona además ingresos adicionales a los agricultores y, por ser una fuente de madera no comprendida en los bosques propiamente dichos, contribuye a aliviar la presión a que están sometidos los pocos naturales que quedan.
La Conferencia recomendó que, en los planes relativos al aprovechamiento de sus tierras, reserve cada país algunos terrenos al cultivo del álamo, ya sea como plantaciones comunes y corrientes, barreras protectoras, rompevientos o alamedas. Los rodales naturales de álamos deben mejorarse plantando tipos convenientes seleccionados. Hay que proporcionar asistencia directa o indirecta a los cultivadores del álamo, y poner a su disposición toda clase de informes sobre las mejores técnicas que deben aplicarse en la plantación, en los viveros y en el campo.
Se convino en que debe hacerse un estudio de las diversas especies de clones cultivados (cultivars), empleando para ello una forma autorizada de identificación. Para que la identificación sea más fácil, se deberían establecer «populeta» en cada país y quizás un «populetum» central para toda la región.
El método actual, que consiste en tomar estacas y pies en cualquier árbol, sin restricciones, con frecuencia lleva a una poda excesiva. Por ningún motivo debe podarse más de dos tercios de la altura total del árbol. Se recomendó que el álamo sólo se cultivase empleando material seleccionado de viveros especializados, y distribuido a través de organismos debidamente reconocidos. Un control de las variedades, organizado de esta forma, y para poner en práctica el cual se estimó indispensable la celebración de un acuerdo regional, debe tener como objetivo, únicamente, el de introducir en los países de la región álamos de origen certificado y propiedades bien conocidas. Se afirmó que esta medida es de la mayor importancia por lo que hace a la lucha contra plagas y enfermedades.
Se estudió con todo cuidado el problema del espaciamiento. Para plantar los tipos de álamo cultivados tradicionalmente en las tierras de regadío, y en asociación con los cultivos campestres, se recomendó un espaciamiento mínimo de 1,50 m. entre hileras, y de 75 cm. entre los Arboles de la misma hilera. Pasados cuatro años, se debe entresacar un árbol de cada dos, volviendo a realizar la misma operación transcurridos otros cuatro años. Si se desea obtener madera de mayor tamaño, se dará más espaciamiento. Hay que continuar con los experimentos sobre el espaciamiento óptimo, o comenzarlos si aún no se ha hecho, especialmente por lo que se refiere a los clones introducidos últimamente.
Sería muy conveniente emprender un estudio pormenorizado de las propiedades físicas de los álamos cultivados o que crecen naturalmente en cada país de la región. Se pidió a los gobiernos que dispusieran lo necesario para que, a la mayor brevedad, se iniciaran dichos trabajos. Es de suma importancia mejorar las actuales técnicas de corta; pero este mejoramiento no se debe realizar de manera repentina, puesto que tropezaría con las tradiciones y costumbres muy arraigadas en la población. Las escuelas de silvicultura y las industrias madereras pueden contribuir notablemente en este sentido.
En las excursiones al campo organizadas para la semana siguiente a la Conferencia, se visitaron las zonas de Wadi Barada, Chuta y Latakia, en Siria; Bcharré y el valle de Bequaa, en el Líbano; y los montes Trodos y Paphos en Chipre. Gracias a la excelente organización de estos viajes, pudo hacerse un fructuoso intercambio de ideas sobre el cultivo del álamo, en particular, y sobre la silvicultura en general.
CONFERENCIA LATINOAMERICANA DEL PAPEL Y LA CELULOSA
A invitación del Gobierno de la Argentina se celebrará en Buenos Aires el próximo una reunión de funcionarios oficiales, técnicos e industriales para tratar del desarrollo de la pasta y el papel en la América Latina. La reunión, que He organiza bajo los auspicios conjuntos de la FAO y de la Comisión Económica para América Latina, consistirá en una discusión y un seminario.
Se espera que asistan representantes de todas las repúblicas latinoamericanas, así como especialistas destacados en el ramo de la pasta y el papel de otras partes del mundo. Se dedicará la atención principalmente a los aspectos económicos y técnicos de la fabricación de pasta y papel a base de los recursos locales disponibles, así como a los problemas que se refieren a los mercados. Entre los temas que serán discutidos figuran los siguientes:
1. consumo, producción y comercio de pasta y papel en la América Latina;
2. aspectos económicos de la fabricación de pasta y papel:(a) de coníferas,
(b) de maderas de especies frondosas tropicales y subtropicales,
(c) de bagazo;3. medidas indispensables para proyectar nuevas industrias de pasta y papel;
4. perspectivas para el desarrollo de las industrias de pasta y papel en varios países de América Latina.
OCTAVO CONGRESO DE CIENCIA DEL PACIFICO
En noviembre de 1953 se celebró en las Filipinas el Octavo Congreso de la Asociación Científica del Pacífico, a la que pertenecen todos los países de Asia, Oceanía y las Américas, que bañan sus costas en el Océano Pacífico. Las actas pueden conseguirse dirigiéndose al Secretario Ejecutivo, Consejo Nacional de Investigación de las Filipinas, Universidad de las Filipinas, Ciudad Quezón.
Se hicieron importantes recomendaciones sobre silvicultura, y entre ellas la de coordinar la investigación sobro productos forestales en la región del Pacifico. Se llamó la atención sobre el sistema de fichas perfeccionado por la Dirección de Productos Forestales, CSIRO, Melbourne, Australia, que, con ligeras modificaciones se ha formulado ya para Malaya Nueva Guinea, Borneo Septentrional, Australia y las Filipinas, Se propuso que otros países del Pacífico deseosos de emplear tal sistema macroscópico de clasificación de fichas, utilizaran tarjetas parecidas con información que pueda ser objeto de intercambio en la región del Pacifico.
Presidió el Comité Permanente de Recursos Forestales de la Zona del Pacífico el señor H. G. Keith, Jefe de la Misión Forestal de la FAO en Filipinas, y sus miembros procedían de Borneo Septentrional, Hawaii, Australia, los Estados Unidos, el Canadá, Perú, Honduras, Nueva Zelandia, Tailandia, Nicaragua y las Filipinas.
El Consejo decidió celebrar su Noveno Congreso en Bangkok, en enero de 1958.
El próximo número de Unasylva estará dedicado al
CUARTO CONGRESO MUNDIAL DE SILVICULTURA
Dehra Dun, Indio
11-22 diciembre de 1954
