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INFORME SOBRE LAS CONSIDERACIONES GENERALES DE LAS REUNIONES CONJUNTAS FAO/OMS DE 1997 Y 1998 SOBRE RESIDUOS DE PLAGUICIDAS [7] (Tema 4 del programa)


JMPR de 1997
JMPR de 1998

JMPR de 1997

18. El Comité apoyó la propuesta hecha por la JMPR de 1997 de establecer el término de “LMRS” (Límite Máximo de Residuos para Supervisión) como instrumento útil para los cálculos de ingestión y decisiones de la gestión de riesgos en torno a residuos de plaguicidas sobre los cuales era insuficiente la información disponible para concluir que su ingestión sería inferior a la IDA. No obstante, el Comité invitó a la JMPR a reconsiderar el término de “LMRS”, pues la palabra “supervisión” inducía a confusión. El Comité concluyó que los LMRS serían tratados como LMR normales, a los que se les añadiría una nota indicando que no podía garantizarse que la ingestión no excedería la IDA. Estos LMR no deberían adelantarse al Trámite 8 hasta que no se solucionase la preocupación por la ingestión.

19. Se habían recibido observaciones sobre la extrapolación de datos de residuos para los cultivos secundarios de los países desarrollados solamente, que respaldaban las recomendaciones y requisitos de datos especificados en el informe de la JMPR de 1997.

JMPR de 1998

20. El Comité tomó nota de los términos generales del informe de la JMPR de 1998, concretamente la capacidad de la JMPR para efectuar exámenes periódicos; el uso de datos procedentes de pruebas biomédicas que incluían personas humanas en la evaluación del riesgo; cuestiones relacionadas con la evaluación del riesgo de agregados y acumulativo; avances sobre el desarrollo de ingestiones a corto plazo estimadas internacionales (ICPEI); ejemplos elaborados de la estimación de RMES y niveles de residuos máximos para productos de origen animal; uso de documentos orientativos de la OCDE; establecimiento de requisitos sobre datos de residuos mínimos a través del Foro de la OCDE para plaguicidas; requisitos de datos para la validación de procedimientos analíticos; datos sobre residuos que reflejan las BPA de los países en desarrollo; el formato a utilizar para resumir los datos toxicológicos; la definición de ensayos supervisados independientes sobre residuos; empleo del marco para la evaluación de la carcinogenicidad que está desarrollando el Programa Internacional para la Seguridad Química; procedimientos para estimar una dosis de referencia aguda; e interpretación de la inhibición de la colinesterasa. También se tomó nota de que se estaban realizando evaluaciones del riesgo dietético para todos los plaguicidas que eran objeto de evaluación en la Reunión.

21. El Comité reconoció los problemas asociados con el creciente volumen de trabajo de la JMPR. La mayoría de los participantes (que actuaban a título individual como expertos) eran empleados de organismos reguladores nacionales. En muchos casos, sus empleadores no les daban suficiente tiempo durante su horario laboral para realizar los amplios exámenes tan laboriosos que eran necesarios para Preparar sus documentos de trabajo sobre residuos y toxicológicos, por lo cual tenían que dedicar parte de su propio tiempo a esta actividad. Además, en ocasiones su trabajo no se reconocía como esencial para la labor del CCPR consistente en establecer normas internacionales para los alimentos. Por otra parte, se observó que la presentación de documentos utilizando el formato normalizado de la OCDE y el uso de documentos nacionales podrían incrementar la eficiencia de la JMPR. El Comité pidió a la Secretaría de la JMPR que preparara, para examinarlo en su próxima reunión, un breve documento en el que se hiciesen propuestas prácticas para abordar esta cuestión.

22. La JMPR fue animada por varios delegados y observadores a avanzar lo más rápidamente en la formulación de procedimientos para la evaluación de la exposición agregada (exposición a un solo plaguicida desde varias fuentes) y la exposición acumulativa (exposición a varios plaguicidas con un mecanismo de toxicidad común o que producen efectos tóxicos similares). El Comité observó que debería concentrarse el empeño en cuestiones que pudieran abordarse con mayor facilidad. La exposición agregada era por una serie de razones extremadamente difícil de apreciar a nivel internacional. A pesar de que todavía quedaban por resolver una serie de cuestiones en torno a la evaluación del riesgo acumulativo antes de que pudiera efectuarse de forma rutinaria, la JMPR debería concentrarse en este aspecto. El desarrollo de procedimientos para evaluar la exposición acumulativa a nivel nacional o regional sería útil para la elaboración, por parte de la OMS, de procedimientos para la exposición acumulativa (véase párr. 37).

23. El Comité mostró su aprecio por los avances que la JMPR había realizado en el desarrollo de procedimientos para establecer Dosis de referencia agudas, y animó a la JMPR a que utilizara en el futuro el trabajo realizado en este campo por los gobiernos nacionales y la Comunidad Europea.

24. La JMPR de 1998 llegó a la conclusión de que sería prematuro realizar cálculos de la ICPEI, de manera especial porque de muchos gobiernos no se habían recibido datos sobre un percentil del 97,5 de consumo de alimentos y pesos medios de los productos. El Representante de la OMS informó que, en respuesta a la Circular CL 1998/29-PR, se había recibido información sobre un percentil del 99,5 de consumo (consumidores solamente) para la población general y entre los niños de 6 años de edad y menores, de Australia, los Estados Unidos de América, Francia, Japón, Países Bajos y Reino Unido. Sin embargo, los datos proporcionados por los 6 países no eran del todo congruentes y se necesitaba más información antes de poder utilizar las bases de datos para la evaluación de la exposición a un riesgo agudo. Las Delegaciones de Canadá y Sudáfrica indicaron que en el 2000 se dispondría de datos adecuados. Datos sobre pesos medios de los productos se habían recibido de los Estados Unidos de América, Francia y el Reino Unido. No obstante, también era necesario aclarar más estos datos antes de poder preparar una base de datos refundida.

25. El Comité acordó debatir los métodos utilizados para calcular la ICPEI en su próxima reunión, cuando se disponga de ejemplos elaborados para apreciar su utilidad como herramienta de control a nivel internacional. El Comité animó a todos los gobiernos que tuvieran tal información a que se la proporcionaran a la OMS lo antes posible para garantizar que sus pautas de consumo y los pesos unitarios se tuvieran en cuenta. Se recordaría esto a los gobiernos enviándoles una circular.

26. Al no tener oportunidad para debatir todas las cuestiones generales de consideración abarcadas en el informe de la JMPR de 1998, el Comité acordó incluir el informe en el programa de la próxima reunión.


[7] Residuos de plaguicidas en los alimentos - 1997 (Estudios FAO: Producción y Protección Vegetal Núm. 145, 1998) y 1998 (Estudios FAO: Producción y Protección Vegetal Núm. 148 de la FAO, 1999).


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