Microorganismos e invertebrados

El conjunto de los microorganismos y los invertebrados constituye el grupo más numeroso de especies de la Tierra. Los invertebrados son un grupo de gran diversidad, que engloba desde insectos diminutos hasta calamares gigantes, y representan más del 95 % de todas las especies animales. Los microorganismos comprenden una inmensa diversidad de organismos que son demasiado pequeños para poder ser observados a simple vista. Ambos grupos son esenciales para la alimentación y la agricultura.

Varios tipos de microorganismos establecen una simbiosis mutuamente beneficiosa con las plantas agrícolas (por ejemplo, al colonizar las raíces y mejorar la absorción de nutrientes) o los animales (por ejemplo, porque habitan el rumen de especies tales como bovinos, ovinos y caprinos y les permiten digerir alimentos fibrosos). Asimismo, los microorganismos proporcionan servicios vitales en el procesamiento de alimentos, como la fermentación por levaduras y bacterias en la producción de pan, yogur y varios otros alimentos. Muchos cultivos dependen de polinizadores invertebrados, en general las abejas. Tanto los microorganismos como los invertebrados son importantes agentes de control biológico y resultan indispensables para el ciclo de los elementos nutritivos y para la formación y el mantenimiento de los suelos.

Lamentablemente, incluso ahora que los científicos están descubriendo las numerosas funciones y valores de los microorganismos y los invertebrados, esta diversidad se está erosionando o perdiendo. Los cambios en el uso de la tierra y la consiguiente pérdida de hábitat, el uso de plaguicidas y fertilizantes, el cambio del clima y las invasiones de especies exóticas han alterado el equilibrio de los ecosistemas y obstaculizado la prestación de los valiosos servicios ecosistémicos que proporcionan los microorganismos y los invertebrados.

La FAO tiene una larga tradición de trabajo técnico sobre la gestión de los microorganismos y los invertebrados en la alimentación y la agricultura, por ejemplo, su utilización en la gestión integrada de plagas. Además, facilita y coordina dos iniciativas mundiales del Convenio sobre la Diversidad Biológica en este ámbito: la Iniciativa Internacional para la conservación y el uso sostenible de polinizadores y la Iniciativa Internacional para la conservación y la utilización sostenible de la diversidad biológica de los suelos (documentos disponibles únicamente en inglés). Muchas organizaciones asociadas colaboran con la FAO en estas importantes iniciativas.
La biodiversidad del suelo está en peligro en todas las regiones del mundo.
Cerca del 90 % de las especies de plantas de floración dependen, en diferente grado, de los polinizadores (vertebrados e invertebrados).
Aproximadamente tres cuartos de los cultivos mundiales que producen frutas y semillas para el consumo humano dependen, al menos en parte, de los polinizadores.
El valor del mercado mundial de productos de control biológico (como los productos semioquímicos y naturales, así como los agentes de control biológico propiamente dichos) ascendió a 3 600 millones de EUR en 2019.
Se estima que el 99 % de las especies de microorganismos siguen sin estar descritas.
Las más de 800 colecciones inscritas en el Centro Mundial de Datos sobre Microorganismos contienen en conjunto 3 293 403 cepas (a mayo de 2021), que representan 42 106 especies de bacterias y hongos procedentes de 78 países y regiones.