Plataforma Técnica Regional para la Agricultura Familiar

Mercados

Ante la gran presión que enfrentan los sistemas agroalimentarios producto de los cambios climáticos, demográficos y económicos de décadas recientes, uno de los mayores desafíos reside en asegurar la seguridad alimentaria de la población. A nivel local, se observa que las ciudades intermedias y pequeñas están creciendo, incorporando en sus cuencas alimentarias a las zonas rurales donde los agricultores familiares desarrollan sus medios de vida, produciendo alimentos, prestando servicio y generando oportunidades económicas dentro de los sistemas agroalimentarios.

La agricultura familiar juega un rol clave garantizar el acceso a productos locales, auténticos, frescos, sanos y de temporada de manera eficiente, oportuna, inclusiva y sostenible, sin embargo, la comercialización sigue siendo uno de los principales desafíos enfrentados por el sector. Ante ello, resulta necesario generar políticas públicas que promuevan la participación de la agricultura familiar en el abastecimiento alimentario de los territorios, tanto para los consumidores urbanos como rurales, lo que permite fortalecer la conexión entre productores y consumidores, contribuyendo a la creación de sistemas alimentarios más sostenibles y resilientes.

Los agricultores familiares tienen el potencial de adaptarse de manera rápida a las nuevas exigencias de los mercados globales, así como de inyectar ingresos en las economías rurales, lo que permite una mayor dinamización de los territorios. Por consiguiente, es fundamental brindarles el respaldo necesario para superar las barreras de entrada habituales que enfrentan en su inserción comercial. Las políticas públicas deben enfocarse en facilitar la integración de los agricultores familiares en las cadenas agroalimentarias locales y globales, mediante el desarrollo de infraestructuras, servicios y capacidades que les permitan aprovechar las oportunidades que ofrecen estos nuevos mercados. Asimismo, es esencial promover mecanismos de comercialización que reconozcan e incorporen las dinámicas y roles de los actores locales, las tecnologías digitales y las demandas y necesidades propias de la agricultura familiar.