La superación de las desigualdades de género arraigadas en los sistemas agroalimentarios y el empoderamiento de las mujeres son acciones fundamentales para lograr sistemas agroalimentarios inclusivos y resilientes, así como para alcanzar los objetivos de erradicar la pobreza y eliminar el hambre a nivel mundial. Las mujeres desempeñan un papel crucial en la agricultura familiar, representando la mitad de su población vinculada a este sector.

El rol de las mujeres en el desarrollo de las sociedades rurales trasciende su aporte en labores productivas y de cuidado, contribuyendo también con conocimientos sobre prácticas agrícolas locales y ancestrales, y la conservación de la biodiversidad. Las mujeres rurales se dedican tanto a actividades agrícolas como no agrícolas, y tienen un rol fundamental en la gestión de los recursos naturales, así como en la producción, procesamiento, conservación y comercialización de alimentos. Además, diversifican las fuentes de ingresos y garantizan la seguridad alimentaria, la nutrición y el bienestar de sus familias y comunidades.

A pesar de que las mujeres muestran una inclinación similar a los hombres por desempeñarse en los sistemas agroalimentarios, continúan enfrentando condiciones desiguales que se han agravado debido a las recientes crisis. Ante la complejidad de estos desafíos, se hace necesario diseñar e implementar políticas focalizadas que fomenten la participación integral de las mujeres en los sistemas alimentarios a lo largo de las cadenas de valor, fortaleciendo capacidades para su organización productiva y participación en los procesos de toma de decisión, reconociendo y aprovechando las múltiples funciones de la agricultura familiar para fortalecer el papel de las mujeres en las comunidades rurales.

Contacto

Ricardo Rivera
Coordinador de Comunicaciones de la Iniciativa IR2

[email protected]
FAO Regional Office for Latin America and the Caribbean
Av. Dag Hammarskjöld #3241, Vitacura, Santiago de Chile