Encuentro Latinoamericano y Caribeño del Decenio de las Naciones Unidas para la Agricultura Familiar | FAO (Inauguración)

Durante los últimos años, los desafíos en América Latina y el Caribe se han intensificado producto del impacto de las crisis globales, como las secuelas de la pandemia de COVID-19 en los medios de vida de los agricultores familiares y las consecuencias del conflicto entre Rusia y Ucrania en los mercados globales de alimentos e insumos. Estas crisis interactúan con las condiciones sociales, económicas y ambientales propias de la región, y requieren de intervenciones específicamente diseñadas para mitigar sus impactos.

A pesar del escenario adverso, la región de América Latina y el Caribe ha sido clave para evitar una crisis alimentaria de mayor escala, logrando sortear los problemas de seguridad alimentaria derivados de la pandemia, la guerra y la intensificación de los impactos de un cambio climático cada vez más presente. Los efectos observados en el número de personas que padecen de hambre, que ha alcanzado el nivel más alto de los últimos 20 años, y los aumentos sostenidos en los índices de precios, con máximos históricos durante lo que va del año 2022, dan cuenta de una situación crítica que requiere de acción inmediata, y en la cual la agricultura familiar debe tomar un rol protagónico.

En el escenario de recuperación post pandemia, la agricultura familiar ha cumplido un rol fundamental en la necesaria transformación de los territorios rurales, especialmente impulsando sistemas agroalimentarios más innovadores, eficientes, resilientes y sostenibles. Para ello, los países de la región, y el mundo, se encuentran fortaleciendo los espacios de diálogos nacionales, subregionales y regionales, con el objetivo de colocar a la agricultura familiar en el centro de las políticas públicas para la sostenibilidad de los sistemas agroalimentarios.

06/12/2022