La FAO y el Gobierno de México ofrecen un apoyo vital a los agricultores de Antigua y Barbuda afectados por la sequía

Saint John's, Antigua y Barbuda - La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Gobierno de México y el Gobierno de Antigua y Barbuda suministraron depósitos de almacenamiento de agua de 1 000 galones a 12 agricultores de Antigua y Barbuda como parte del subproyecto ‘Abordaje del nexo agua-energía en la agricultura’ de la Iniciativa México-CARICOM-FAO “Cooperación para la Adaptación y la Resiliencia al Cambio Climático en el Caribe” o, en pocas palabras, Iniciativa Caribe Resiliente. 

Antigua y Barbuda, como diversos países del Caribe, se enfrenta a problemas de escasez de agua. A media que los efectos del cambio climático se hacen más evidentes, con aumentos del nivel del mar y cambios en el régimen de lluvias, la disponibilidad de agua dulce y la calidad de esta se reducen y al mismo tiempo aumenta la frecuencia y la gravedad de las sequías. Esto, junto a las ineficiencias en el uso del agua, afecta particularmente la producción agrícola, que debe competir intensamente con otros sectores por el uso de los recursos de agua. 

El proyecto está financiado por la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID) y Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México, y la FAO lo está ejecutando en 14 países de la CARICOM. La Iniciativa Caribe Resiliente apoya a los pequeños Estados insulares en desarrollo (PEID) que se enfrentan a estos problemas utilizando el enfoque integrado del nexo Agua-Energía-Alimentos en Barbados, Antigua y Barbuda, Jamaica y Saint Kitts y Nevis. 

El suministro de depósitos es parte del apoyo que ofrece el proyecto y una solución inmediata para las necesidades de almacenamiento de agua de 12 agricultores, siete de los cuales están en Antigua y cinco en Barbuda. Los depósitos son un alivio vital para los agricultores que se enfrentan a problemas de escasez de agua y les ayudan a mejorar la producción agrícola y a garantizar la seguridad alimentaria a pesar de las consecuencias del cambio climático. 

Mali Barnes, que es el Coordinador Nacional del Proyecto de la FAO y trabaja estrechamente con el Ministerio de Agricultura y el Consejo de Barbuda para facilitar la distribución de los depósitos, dice que “Proporcionar estos depósitos de 1 000 galones es una medida vital en el apoyo a nuestros agricultores de Antigua y Barbuda. Al empoderarlos mediante una capacidad mejorada de almacenamiento de agua les estamos permitiendo optimizar sus prácticas de riego e incrementar su producción agrícola, lo cual acaba por contribuir al logro de los objetivos nacionales de seguridad alimentaria." 

El proyecto apoya a 20 agricultores mediante el suministro de tecnologías climáticamente inteligentes como los sistemas de riego o microrriego que funcionan con energía solar y de recogida y almacenamiento de agua de lluvia para mejorar la eficiencia y la gestión del agua y el acceso a energía limpia climáticamente inteligente para aumentar la productividad del agua agrícola. Este apoyo, junto a a actividades de capacitación sobre la gestión eficaz de los recursos de agua, tiene el objetivo de contribuir a crear resiliencia al cambio climático y a garantizar la seguridad alimentaria en Antigua y Barbuda. 

Iesha Punther, agricultura y beneficiaria del proyecto explicó cómo el proyecto había ayudado a impulsar la productividad agrícola en su explotación diciendo: “Me siento agradecida por haber sido una de las personas beneficiarias del proyecto. Barbuda sufre una sequía extensa y persistente que ha causado muchos problemas en mi explotación. No obstante, este depósito, así como la formación que he recibido a través del proyecto, me ayudarán a gestionar mi agua de forma más eficiente y a aumentar la producción”.